Muqtada al Sadr pide que Al Maliki explique ante el Parlamento la compra de detectores de bomba falsos

Actualizado: sábado, 4 mayo 2013 6:11

MADRID, 4 May. (EUROPA PRESS) -

El clérigo chií Muqtada al Sadr, que encabeza el partido iraquí Bloque Sadr, ha solicitado este viernes al primer ministro, Nuri al Maliki, que se disculpe y comparezca ante el Parlamento para explicar un acuerdo de compra de detectores de bombas que resultaron ser falsos.

Al Sadr ha subrayado que la sentencia de diez años de cárcel contra el empresario británico responsable de la venta de estos aparatos es insuficiente y ha reclamado que sea ejecutado, ya que el acuerdo "ha provocado la muerte de miles de iraquíes".

James McCormick, de 56 años, fue condenado por fraude la semana pasada por vender material basado en una novedosa máquina de 20 dólares para encontrar pelotas de golf perdidas. El empresario consiguió más de 40 millones de dólares en ventas solo a Irak, según la Policía británica. Entre sus clientes también estaba Naciones Unidas.

Los detectores se vendían por hasta 40.000 libras cada uno (algo más de 47.500 euros), pero carecían de ningún componente que funcionara y de ninguna base científica, según se ha revelado durante el juicio.

En la publicidad, se aseguraba que la máquina podía detectar dichas sustancias a hasta un kilómetro bajo tierra, más de 3 kilómetros en el aire y a 33 metros bajo el agua.

Durante el juicio, McCormick indicó que había vendido los artilugios a la Policía en Kenia, el servicio penitenciario de Hong Kong, el Ejército de Egipto y la guardia fronteriza de Tailandia. Asimismo también se vendió a Níger y Georgia entre 2008 y 2010, mientras que Irak compró unos 6.000 aparatos.

Asimismo, Al Sadr ha solicitado al Gobierno que compense a las víctimas del acuerdo, al tiempo que ha pedido a Londres que someta a la compañía a la ley antiterrorista, según ha informado la agencia iraquí de noticias.

Por último, ha pedido al dueño de la compañía que revele los nombres de los funcionarios iraquíes que fueron "sobornados" para aceptar la compra e impulsar la firma del contrato.

Al Sadr el líder de facto de la Ciudad de Sadr en Bagdad y está al frente del Ejército del Mahdi, brazo armado del Bloque Sadr. Es, junto a Alí al Sistani y Ammar al Hakim, uno de las figuras religiosas y políticas más influyentes del país sin ocupar ningún cargo gubernamental.

El clérigo consiguió popularidad tras la caída del Gobierno del expresidente Sadam Hussein tras la invasión de 2003, cuando abogó por la creación de una "democrática islámica". Tras la salida del poder de Hussein, Al Sadr organizó a miles de sus seguidores para crear el Ejército del Mahdi.

Este grupo se ha enfrentado por las armas en varias ocasiones a las fuerzas estadounidenses y de otros países de la coalición, mientras que el Bloque Sadr ha conformado sus propios tribunales religiosos, ha puesto en marcha servicios sociales, y ha abierto cárceles en las zonas bajo su control.

La base de su apoyo son los integrantes de la comunidad chií más desfavorecidos, si bien cuenta con un importante respaldo entre la comunidad suní por su imagen como resistente a la ocupación extranjera.