EL CAIRO, 18 Dic. (Reuters/EP) -
La oposición egipcia ha vuelto a manifestarse este martes en El Cairo contra la nueva Constitución propuesta por el presidente egipcio, el islamista Mohamed Mursi, a pesar de que este fin de semana podría estar aprobada en la segunda ronda del referéndum después de que este pasado sábado ganase el 'Sí' en la primera parte del plebiscito.
Cientos de personas se han manifestado en las inmediaciones del palacio presidencial con cánticos de "Revolución, revolución, por el amor a la Constitución" y han reclamado a Mursi que dimita de su cargo. Los medios estatales informaron el domingo de que el 57 por ciento de la población votó a favor del 'Sí' a la puesta en vigor de la carta magna, de corte islamista.
Los concentrados este martes se han dirigido posteriormente a la plaza Tahrir debido a que el palacio Presidencial sigue tomado por los tanques desde que se produjeron las protestas hace semanas por la publicación del decreto que daba poderes ilimitados a Mursi. El presidente retiró posteriormente esta reforma.
Mohamed Adel, de 30 años, ha acudido a esta nueva concentración. "He estado acampando aquí (palacio Presidencial) durante semanas y lo continuaré haciendo hasta que la constitución que ha dividido el país y por la que ha muerto gente sea retirada", ha asegurado.
La situación en Egipto se ha ido deteriorando desde que Mursi anunció a finales de noviembre que se celebraría el plebiscito para que la población votase la nueva constitución. Con la salida de los grupos liberales y laicos de la Asamblea Constituyente, la carta magna está redactada por grupos de corte islamista.
Además, el Club de Jueces se ha negado a controlar el plebiscito de este fin de semana y del próximo y se ha convertido en uno de los principales grupos críticos con Mursi. El Frente Nacional de Salvación, el principal grupo opositor, denunció irregularidades en algunas zonas en al celebración del referéndum.
Con la aprobación de la constitución, podrían celebrarse elecciones el próximo año, lo que podría permitir que Egipto salga de la crisis política en la que está actualmente inmerso.