SIDNEY, 20 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Policía de Nueva Zelanda emitió hoy una orden de arresto contra Nai Yin Xue, el padre de la niña abandonada el pasado fin de semana en una estación de tren de Melbourne (Australia), después de que las autoridades confirmaran que el cadáver encontrado ayer en el maletero de un coche de la familia corresponde a la madre de la niña, Anan Liu.
Según informó el portal de noticias 'news.com.au', la Policía busca a Xue por asesinato y secuestro. Se cree que el hombre se encuentra en algún punto de Estados Unidos, hasta donde voló tras dejar abandonada a la pequeña Qian Xun Xue, a la que las autoridades llaman cariñosamente 'Pumpkin' (en inglés, calabaza).
Un portavoz de la Policía neozelandesa, Noreen Hegarty, explicó que la orden de arresto se ha enviado a la Interpol, en Estados Unidos. Además, el FBI se ha ofrecido a colaborar con las autoridades neozelandesas.
Tras conocer el abandono de la niña, se supo que la madre estaba en paradero desconocido desde el 10 de septiembre, poco antes que el padre se marchara de la localidad en la que vivía la familia, Auckland (Nueva Zelanda), hasta Australia con su hija. Las autoridades neozelandesas acudieron a la casa de la familia y, tras registrar sus propiedades, encontraron el cadáver de una mujer de origen asiático en el maletero de un coche registrado a nombre del padre.
Según los primeros resultados de los análisis realizados al cuerpo, la mujer murió durante un "episodio violento", antes de que su cuerpo fuera arrojado al maletero del coche. La Policía ya había informado de que la familia era conocida por las autoridades, debido a unos episodios de violencia doméstica.
El portal de noticias australiano asegura hoy que la mujer fallecida tenía un amante y había participado en un foro de internet para encontrar el "amor verdadero" hace unos meses. En un blog personal publicado en la web, la mujer relataba una historia amorosa que mantuvo durante dos meses con un hombre casado que tenía un hijo. Mientras, la madre de Liu, Liu Xiao Ping, de 53 años, se prepara para viajar desde Hunan, en China, hacia Nueva Zelanda para asistir al funeral de su hija y después a Australia, para buscar a su nieta, cuya imagen ha recorrido el mundo.
En declaraciones a la emisora ABC, la mujer aseguró que su hija era una buena madre. "Era una persona muy amable y sencilla, era muy confiada e inocente, y no tenía mucha experiencia social", relató. "Cuidaba mucho de su familia, su hija y su marido", aseguró. La pequeña 'Pumpkin' permanece con una familia de acogida desde que se hiciera cargo de ella las autoridades australianas.
