GINEBRA, 24 May. (EUROPA PRESS) -
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) incrementó su previsión de crecimiento para 2007 en dos décimas respecto a su anterior estimación, hasta el 2,7% a pesar de la ralentización de la economía estadounidense.
La OCDE establece que EEUU crecerá este año un 2,1%, muy por debajo de su potencial, mientras que en 2008 mostrará síntomas de recuperación y su PIB aumentará un 2,5%.
El organismo subrayó que la situación económica actual es mucho mejor "de la que se ha experimentado en años" y destacó "la sólida y sustentada recuperación de la economía europea" además del "suave aterrizaje" de Estados Unidos, la "sólida trayectoria" de Japón y la "boyante" actividad en China e India.
Además, la OCDE agrega que este este crecimiento sostenido en las economías de la organización podría ser impulsado por la sólida creación de empleo y la caída de las tasas de paro.
Respecto a la economía Europea, el organismo destaca la sólida evolución de la misma subrayando especialmente la recuperación de Alemania e Italia, "mucho más sólida de lo inicialmente esperada".
La OCDE establece que en Estados Unidos, tras la debilidad del primer trimestre, la economía recuperará el tono de manera gradual gracias al sustento del sólido mercado laboral "que podría sentar las bases de un retorno progresivo a la normalidad económica", agrega el organismo.
La bonanza económica de China, cuyo Gobierno intenta amortiguar la inversión para contener la expansión del crecimiento, del 11%, colaborará a impulsar a la economía nipona a través de la acogida de mayores exportaciones.
ESCENARIO "DESPEJADO" PARA LA ZONA EURO
Sin embargo, estas expectativas económicas no están exentas de riesgos, apunta la OCDE, que subraya la existencia de desequilibrios. De hecho, "la balanza entre la demanda agregada y el suministro está mostrando síntomas de sobrecalentamiento".
En el caso de Estados Unidos, el riesgo se encuentra en el enfriamiento del mercado inmobiliario. Además, la inflación sigue más elevada que lo deseado, lo que está provocando que la Reserva Federal (Fed) mantenga una política de tipos restrictiva.
En el Reino Unido, existen tensiones relacionadas con la inflación, aunque el escenario de la eurozona aparece mucho más despejado, ya que se ha alcanzado el objetivo oficial de inflación del 2% mientras que la economía sigue expandiéndose vigorosamente.
En Japón, donde todavía no se ha salido del todo de la deflación, mientras que el crecimiento podría aumentar menos de lo esperado, las autoridades monetarias niponas necesitan mantener los tipos estables en los niveles actuales.
Andalucía
