MADRID 20 Mar. (EUROPA PRESS) -
La madre del reo palestino Samer al Issawi, que lleva más de siete meses en huelga de hambre en protesta por su detención, ha enviado este martes una carta al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, solicitándole que "intervenga inmediatamente" para salvar la vida de su hijo.
En el texto, publicado apenas un día antes de que Obama inicie su visita a la región en Israel, Laila al Issawi, ha urgido al mandatario estadounidense a que "se lave las manos de la sangre de su hijo presionando a Israel para su liberación".
"Le pido --como máximo aliado de Israel, tal y como usted mismo se describe, y como presidente del país más poderoso del mundo, como otros le describen-- que intervenga inmediatamente para salvar la vida de mi hijo", ha dicho, según ha recogido el diario libanés 'Al Akhbar'.
"Esta es su oportunidad de salvar a Samer de los colmillos de esta brutal ocupación, para que no tenga que preguntarme, junto a otros millones de personas de todo el mundo, por qué no nos ayudo", ha agregado Laila al Issawi.
"Soy una madre palestina como miles de otras madres palestinas que sufren y padecen dolor. Soy madre de Fadi, que fue asesinado por Israel en 1994, de Midhat, que está en una cárcel de israelí, de Raafat, cuya casa destruyó Israel, dejando a mi familia sin hogar", ha explicado.
"Soy madre de Shirin, Firas y Shadi, que no han podido evitar ser detenidos y torturados en reiteradas ocasiones. Somos una familia a la que Israel niega el acceso al agua, y nos habría privado la comida y las medicinas si pudiera", ha añadido.
Los hermanos de Al Issawi han denunciado que Israel les ha cortado la electricidad y el agua como castigo por la huelga de hambre del preso, que desde la semana pasada se niega a beber agua, un hecho que ha provocado un mayor deterioro de su estado de salud.
La semana pasada, el abogado del Club de Prisioneros Palestinos Fawwz Shlodi dijo que Al Issawi se encuentra hospitalizado en el centro médico bajo constante supervisión, al tiempo que resaltó que se encuentra en una sala vigilado por tres guardas y con sus pies atados a la cama.
Al Issawi forma parte del grupo de 1.027 prisioneros palestinos que fueron liberados por Israel en 2011 a cambio de la entrega del soldado Gilad Shalit, que fue capturado en junio de 2006 por miembros de las Brigadas Al Qassam --brazo armado de Hamás-- y de los Comités de Resistencia Popular. Sin embargo, Al Issawi fue arrestado de nuevo posteriormente, al igual que otros trece palestinos.
A principios de marzo, Amnistía Internacional (AI) pidió a las autoridades israelíes que garanticen atención la médica adecuada a Al Issawi o que le pongan en libertad para que pueda recibir el tratamiento urgente que necesita.
Según la organización, desde que fue detenido en julio de 2012, fue privado del acceso a su abogado durante 23 días y trasladado posteriormente a la prisión de Nafha, en pleno desierto del Néguev.
Por su parte, el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon, ha expresado su preocupación por el "rápido deterioro" del estado de salud de los presos palestinos en huelga de hambre y ha instado a Israel a "respetar plenamente" los derechos de los reclusos palestinos. Asimismo, ha reclamado que los presos en régimen de detención administrativa sean imputados y juzgados con garantías o, en caso contrario, puestos inmediatamente en libertad.
El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, y el secretario general de la Liga Árabe, Nabil Elarabi, han escrito recientemente a Ban para manifestar su preocupación por este conflicto sobre los presos. El secretario general de Naciones Unidas también trató este tema durante una conversación telefónica con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.