JERUSALÉN 9 Ago. (EUROPA PRESS) -
Alrededor de 400 palestinos regresaron hoy a la Franja de Gaza, el último grupo que permanecía atrapado en el paso fronterizo de Rafá que separa los territorios egipcio y palestino, según explicó una fuente de seguridad en Egipto.
En total, más de 6.000 palestinos han permanecido atrapados en la parte egipcia del paso, después de que Israel ordenara su cierre el pasado mes de junio en respuesta al acto de fuerza que protagonizó Hamás en la Franja de Gaza, de donde desbancó a su rival Al Fatá de todo poder, precipitando así la caída del Gobierno de unidad palestino suscrito entre ambas facciones palestinas el pasado mes de febrero. Muchos de los palestinos han estado viviendo este tiempo en barracas de cemento o en hoteles de bajo coste en el Valle del Sinaí, norte de Egipto.
Según informó el rotativo israelí 'Haaretz', el último grupo de palestinos, unos 400, entraron en la Franja a través del paso fronterizo de Awja, al sur de Rafá, después de que durante la última semana las autoridades egipcias evacuaran a los palestinos del Sinaí, explicó dicha fuente.
Los enfrentamientos que se registraron el mes pasado entre la Policía egipcia y palestinos detenidos en el aeropuerto de Al Arish, en el Sinaí --que denunciaron una falta de fondos, alimentos y atención médica suministrada--, llevaron al Gobierno egipcio a enviar a cientos de policías de refuerzo en su frontera por miedo a que los palestinos la asaltaran. Cientos de palestinos se manifestaron en el aeropuerto para pedir su reapertura.
La mayor parte de los palestinos atrapados en Egipto, con la excepción de algún turista, eran personas que viajaron a Egipto para recibir tratamiento médico y que no pudieron regresar a la Franja de Gaza después de que Israel sellara el paso fronterizo de Rafá.
Otros 30 palestinos permanecen en el aeropuerto de Al Arish y rechazan regresar a la Franja por miedo a ser arrestados al cruzar por territorio israelí, explicó la fuente de seguridad egipcia.
GAZA PRONTO DEPENDERÁ DEL EXTERIOR
Precisamente hoy, el comisionado adjunto de la Agencia de la ONU para los Refugiados de Palestina (UNRWA), Filippo Grandi, advirtió de que la Franja de Gaza pronto dependerá por completo de la ayuda exterior y de que se enfrenta a "desastrosas consecuencias" si no se abren las fronteras con el territorio controlado por el Movimiento de Resistencia Islámica.
Tanto Israel como Egipto cerraron sus fronteras con Gaza para todo excepto para la ayuda humanitaria después de que los milicianos de Hamás tomasen el control de la Franja en junio. El cierre consiguió empeorar la pobreza de los cerca de 1,4 millones de residentes en el territorio, según la Agencia.
Según cifras del 2006, el 80 por ciento de la población de Gaza vivía en la extrema pobreza, según el Banco Mundial, mientras que el paro subió en 2006, del 30,3 por ciento al 34,8 por ciento, según cifras oficiales auque la organización israelí de Derechos Humanos B Tselem, denunció el año pasado que el 70 por ciento de la población de la Franja no tenía un trabajo remunerado.