BRUSELAS 14 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los ministros de Defensa de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) constataron la "urgente necesidad" que existe de proteger de los ataques cibernéticos a las infraestructuras de información, tal y como se comprobó recientemente en Estonia, que días después de iniciada la polémica por la retirada de la estatua al soldado soviético se vio sometida a una avalancha de ataques a través de Internet.
El portavoz de la Alianza Atlántica, James Appathurai, se refirió en rueda de prensa a las conclusiones de una discusión que suscitaron "muchos ministros", pero especialmente el de Estonia, el país que más recientemente y de manera más virulenta ha padecido estos ataques, provenientes de Rusia según las autoridades de Tallin.
Según refirió Appathurai, los ministros constataron "la amplitud y naturaleza de los ataques que Estonia ha sufrido", que, según dijo, "fueron sostenidos, coordinados y dirigidos contra infraestructuras de información pública" de este país. "Tuvieron evidente implicaciones nacionales y sobre la seguridad", añadió.
En este contexto, el portavoz señaló que entre los ministros de Defensa "hubo la impresión de que se necesita un trabajo urgente para incrementar la habilidad de proteger las infraestructuras de información de importancia crítica de la Alianza contra los ciberataques".
Por este motivo, se mostró "seguro" de que de ahora en adelante esta forma de ataques se convertirá entre otros los ámbitos de trabajo de la OTAN.