La Policía militar birmana patrulla por las calles de Rangún buscando a los manifestantes

Actualizado: miércoles, 3 octubre 2007 10:31


RANGÚN, 3 Oct. (EP/AP) -

La Junta Militar comenzó hoy a difundir advertencias con los altavoces de los camiones militares indicando que los soldados están buscando a los participantes en las marchas de la 'Revolución del Azafrán', mientras que el enviado especial de la ONU no ha hecho aún ninguna declaración sobre su reunión con el líder del Gobierno birmano.

Varios vehículos militares patrullaron las calles de Rangún durante la noche anunciando por sus altavoces que los soldados están buscando a los manifestantes. "Tenemos fotografías, vamos a realizar arrestos", se escuchaba por las calles. Aun así, al amanecer, algunos de los residentes se atrevieron a abrir sus comercios.

"La gente está aterrorizada" y no se han tratado los movimientos de descontento que llevaron a esta situación declaró la embajadora estadounidense en Birmania, Shari Villarosa, que actualmente se encuentra en Tailandia. "La población ha sido infeliz durante mucho tiempo", añadió la diplomática, que resaltó que "desde los hechos de la semana pasada, ahora la infelicidad se ha mezclado con la furia y el miedo".

"Por lo que teneos entendido, la policía militar (...) está rondando por la ciudad en mitad de la noche, va a las casas y se llevan a gente", denunció Villarosa. La diplomática indicó que el personal de la Embajada visitó varios monasterios y los encontró completamente vacíos, mientras que otros se encuentran aislados por los militares y los forasteros tienen prohibido el acceso. Además, "hay un número significativamente reducido de monjes en las calles. ¿dónde han ido los monjes? ¿qué les ha pasado?, resaltó.

Por su parte, el enviado especial de la ONU, Ibrahim Gambari, salió del país hoy para dirigirse a Singapur después de finalizar su misión de cuatro días, durante la cual se reunió con el líder de la Junta, el general Than Shwe, y con la líder del movimiento pro democracia, Aung San Suu Kyi. Gambari evitó hacer declaraciones en Singapur y rechazó hacer declaraciones acerca de su visita antes de su reunión con el secretario general de la ONU, Ban Ki Moon el viernes.