BARCELONA, 5 Dic. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro italiano, Romano Prodi, aseguró esta noche que ésta es su "última legislatura" y anticipó, además, que dejará la política si su Gobierno se deshace. El Ejecutivo de Prodi se enfrentó la semana pasada a una importante huelga de transportes motivada en parte por las escasas inversiones previstas para el sector en los Presupuestos del Estado para 2008. Éstos fueron aprobados recientemente por el Parlamento en lo que supuso en realidad la superación, por parte de la coalición gubernamental, de una moción de confianza.
En una entrevista de TV3 recogida por Europa Press, el primer ministro italiano explicó que entró a la política "para crear la unidad y un gran partido de las fuerzas reformadoras", y que este partido "es una realidad".
"Me he ocupado de él durante 12 años y al final ahí está. Llegado este punto, mi tarea acaba con el final del Gobierno", remarcó. Con todo, el líder italiano mostró su esperanza de que su Ejecutivo "llegue al final de la legislatura", en 2011.
LOS PARTIDOS PEQUEÑOS, ÁRBITROS
Prodi reconoció ser consciente de que al ganar las elecciones por un margen "muy pequeño" y construir su coalición, "cualquier partido, por pequeño que sea, se convierte en árbitro de la situación". Según él, "cuando un partido es pequeño, el problema de la visibilidad es muy dramático".
Ante esta situación, el presidente del Gobierno italiano apostó por una reforma urgente de la ley electoral que se asemeje más a la española, "que premia a los partidos más grandes y selecciona a todos aquellos que pueden estar en el Parlamento".
Prodi culpó a su antecesor Silvio Berlusconi, por haber cambiado la ley electoral, y advirtió de cara al futuro: "No se puede reformar una ley electoral con una pequeña mayoría. No basta con el diálogo entre Berlusconi y Walter Veltroni".
La moción de confianza que se presentó ligada a la aprobación del Presupuesto pretendía poner fin a las constantes luchas internas que existen en la coalición de Prodi, que se extienden desde el Partido Cristiano Demócrata hasta el Comunista o los partidos Verdes.
Ante la presentación del informe de la 'troika' sobre Kosovo (UE, Estados Unidos y Rusia), el primer ministro se mostró partidario de que el camino hacia la independencia kosovar "no sea traumático", e insistió en que lo que Italia quiere "es que no haya acontecimientos demasiado precipitados, pero que Europa construya estructuras y voluntades que sean capaces de hacer este paso de forma pacífica".
