SEUL, 6 Dic. (EUROPA PRESS) -
Corea del Norte anunció hoy que no dialogará con Japón en la próxima ronda de conversaciones a seis que se mantendrá en Pekín la semana que viene ante la negativa de Tokio de realizar su aportación a la ayuda energética que se prometió en el marco de dichas conversaciones a Pyongyang.
"No trataremos a Japón como parte en las conversaciones ni trataremos con él, incluso si imprudentemente aparece en la sala de reuniones", advirtió hoy un portavoz del Ministerio de Exteriores norcoreano, en declaraciones a la agencia oficial KCNA. "Japón es el único país parte que no ha hecho nada para cumplir su compromiso y todavía se niega a hacerlo", denunció el portavoz.
La advertencia se produce tan sólo dos días antes de la nueva reunión en Pekín de los seis países que integran este proceso de diálogo para tratar de convencer a Pyongyang de que desmantele su programa nuclear. Los otros países que participan son China, Estados Unidos, Rusia y Corea del Sur.
Estos países habían prometido a Corea del Norte un millón de toneladas de combustible pesado o el equivalente a finales de 2007 a cambio de que Pyongyang desmantelara sus instalaciones nucleares. Alrededor de la mitad de esta ayuda ya ha sido entregada, según la agencia surcoreana Yonhap.
Japón se ha mostrado reacio a realizar su aportación --200.000 toneladas de combustible--, vinculando su asistencia a la cuestión del secuestro de ciudadanos japoneses por parte de Corea del Norte durante la Guerra Fría. Pyongyang devolvió a cinco secuestrados nipones en 2002, pero Tokio insiste en que hay más rehenes vivos que siguen en territorio norcoreano, algo que el régimen comunista niega.
"La intención última de Japón es impedir que la desnuclearización de la península sea una realidad y estimular sus pasos para convertirse en una potencia militar bajo el pretexto de la cuestión nuclear", denunció el portavoz norcoreano. "Un país como este no tiene ni justificación ni calificativo para participar en las conversaciones, al contrario, sólo obstaculiza el camino para alcanzar el objetivo común", remachó.
La cuestión central de esta nueva ronda de conversaciones es si Corea del Norte permitirá que los inspectores internacionales tomen muestras de sus instalaciones nucleares. Pyongyang se ha negado hasta el momento, mientras que Washington, Seúl y Tokio insisten en que es necesario para la verificación.
