MADRID, 25 Feb. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, ha instado a los dirigentes africanos a comprometerse de forma "sostenida" y "al máximo nivel político y diplomático" en la aplicación del Acuerdo Marco de Paz firmado ayer domingo por varios países del continente para poner fin al conflicto en el este de la República Democrática del Congo (RDC). Por otra parte, un grupo de ONG internacionales y regionales ha advertido de que este acuerdo será "papel mojado" si no va acompañado de un mayor compromiso de la ONU y las potencias internacionales y de la implicación de la sociedad civil congoleña.
"Espero sinceramente que el acuerdo marco permita alcanzar una era de paz y estabilidad para los pueblos de la República Democrática del Congo y la región de los Grandes Lagos", ha declarado Ban tras asistir en Addis Abeba a la ceremonia de la firma del acuerdo. Este marco, ha advertido, es un acontecimiento importante, pero solo saldrá adelante si se desarrolla "un enfoque amplio que requiera un compromiso sostenido", ha agregado.
El llamado Acuerdo Marco de Paz, Seguridad y Cooperación contempla la llegada al país de una fuerza internacional neutral para estabilizar la situación y poner fin a dos décadas de enfrentamientos, que se recrudecieron el pasado mes de abril, cuando el grupo rebelde M23 se alzó en armas en la provincia de Kivu Norte contra el Gobierno de Kinshasa, obligando a más de 800.000 personas a abandonar sus hogares.
Jefes de Estado y representantes de once países --la RDC, Congo, Uganda, Burundi, Angola, República Centroafricana, Ruanda, Sudán del Sur, Mozambique, Tanzania y Sudáfrica-- estuvieron presentes en la ceremonia de la firma del acuerdo, además del propio Ban Ki Moon.
LAS ONG
Por su parte, un grupo de organizaciones no gubernamentales internacionales, regionales y congoleñas ha advertido en un comunicado conjunto de que el acuerdo marco "no es suficiente" y han recordado que "los procesos de paz anteriores colapsaron por la falta de transparencia, el débil compromiso internacional y la ausencia de un proceso global".
Por ello, las ONG firmantes --entre otras, Ayuda en Acción, Consejo Noruego para los Refugiados, Peace and Human Rights Centre (PHRC), Comité des Observateurs des Droits de l'Homme (CODHO) y diversos grupos regionales y congoleños-- han reclamado a la ONU, Estados Unidos y la Unión Europea la designación de enviados especiales y "una mayor participación regional".
En una carta abierta (remitida al presidente de la RDC, Joseph Kabila; al presidente en ejercicio de la Unión Africana, Dlamini Zuma; al presidente de Estados Unidos, Barack Obama; a la Alta Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Catherine Ashton; y al propio Ban Ki Moon), las citadas organizaciones han admitido que el acuerdo marco es "una oportunidad para un nuevo tipo de compromiso ante un conflicto que en dos décadas ha devastado las vidas de millones de congoleños", pero han advertido de que será "papel mojado" si no se toman medidas adicionales específicas.
Entre estas medidas, la carta conjunta de las ONG propone el nombramiento de un enviado especial de la ONU de alto perfil con poder para mediar tanto a nivel nacional como regional, la inclusión de la sociedad civil congoleña y de las principales contrapartes donantes bilaterales y multilaterales de Kinshasa en el mecanismo de supervisión nacional propuesto, la vinculación de la ayuda de los donantes a "metas claras y acordadas" y la colaboración genuina entre los gobiernos, los donantes y la sociedad civil.
