MADRID, 12 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de la República Democrática del Congo (RDC) ha creado una comisión de investigación sobre las violaciones de Derechos Humanos cometidas durante los recientes enfrentamientos entre el Ejército regular y el grupo armado rebelde Alianza de Patriotas para un Congo Libre y Soberano (APCLS) en la ciudad de Kitchanga, en la provincia de Kivu Norte (este del país), durante los cuales han muerto alrededor de un centenar de personas.
Según la agencia misionera de noticias MISNA, la comisión ha sido anunciada por el ministro del Interior, Richard Muyej, quien ha informado de que la situación humanitaria y de seguridad en Kitchanga son "muy graves".
Los datos de víctimas por los enfrentamientos por el control de la ciudad --que tuvieron lugar entre el 27 de febrero y el 5 de marzo-- varían según las fuentes, desde los 120 muertos de que ha informado la Conferencia Episcopal congoleño hasta los entre 70 y 80 fallecidos de que han dado cuenta la Cruz Roja local y Radio Okapi, emisora vinculada a la misión de la ONU (MONUSCO).
Asimismo, se calcula que una decena de personas han sido secuestradas por el Ejército y que cerca de 500 vecinos se han quedado sin hogar a causa del incendio de sus viviendas. Aparte, los enfrentamientos han causado alrededor de 100.000 nuevos desplazados internos, muchos de los cuales han buscado refugio en el entorno de una base de la MONUSCO.
Estos damnificados se sumarían a los 1,8 millones que ya han abandonado sus hogares en el este de República Democrática del Congo por los constantes enfrentamientos. Solo en Kivu Norte se han registrado alrededor de 800.000 desplazados internos, una cifra que supone una tercera parte de la registrada en todo el país. Kitchanga se encuentra a caballo entre Masisi y Rutshuru, dos territorios especialmente castigados por la violencia.
ABUSOS DEL EJÉRCITO
Por su parte, los representantes de la sociedad civil de Kitchanga han reclamado a las autoridades militares la retirada del actual contingente del Ejército en la ciudad, al que han acusado de numerosos abusos contra la población civil, en particular de extorsiones y detenciones arbitarias.
Los combates comenzaron el pasado 26 de febrero, cuando el grupo rebelde --uno de los muchos que operan en el este de RDC-- lanzó una ofensiva sobre Kitchanga, de la que fueron finalmente expulsados por el Ejército el 4 de marzo. El APLCS es una milicia que llegó a combatir junto al Gobierno para reprimir los avances del grupo rebelde M23 en Kivu Norte, especialmente durante su gran ofensiva de finales de 2012.
