LONDRES, 26 Ene. (EUROPA PRESS) -
El ministro del Interior británico, John Reid, ha recibido numerosas críticas en su país después de pedir a los jueces que sólo manden a la cárcel a las personas más peligrosas a fin de evitar la saturación de las prisiones. La presión sobre el ministro ha aumentado, además, tras conocerse la dimisión del responsable de Justicia para la Juventud, el profesor Rod Morgan, debido a la práctica de encarcelar a pequeños delincuentes en centros de detención para menores.
Esta semana, Reid y otros ministros del gabinete escribieron a jueces y magistrados pidiéndoles que mandaran a prisión sólo a los criminales más peligrosos y persistentes. Asimiso, el pasado jueves Reid anunció medidas de emergencias para solucionar la crisis de las prisiones.
Un juez ha asegurado que como consecuencia de esa petición no ha enviado a la cárcel a un hombre que descargaba pornografía infantil en internet, Derek Williams, de 46. "Tuve suerte de estar fuera", declaró el propio Williams. "No se puede acusar al juez por lo que ha hecho, sólo estaba realizando su trabajo", explicó.
En el juicio, que se celebró en el tribunal de Mold Crown, se pudo constatar como Williams había descargado de internet decenas de imagenes de material pornográfio en su ordenador. Durante el juicio se declaró culpable de diez cargos de haber fotografíado a menores entre noviembre de 2005 y mayo de 2006.
En una entrevista ofrecida a la BBC, el dimisionario Morgan dijo que las prisiones para menores están siendo inundadas de personas que han cometido delitos de poca importancia. "Estamos al borde de una crisis en el sistema de prisiones", explicó. "Tenemos mucha gente que está en las celdas de la Policía porque no hay espacio para ellos en otro lugar, y esto también sucede para niños y para jóvenes", declaró Morgan.
BASE DEL EJERCITO Las cárceles en Inglaterra y Gales tienen 80.000 presos. Reid explicó que una base del Ejército en el norte de Inglaterra está siendo utilizada como centro para convictos y que también está en negociaciones para la construcción de dos nuevas prisiones.
Respecto a esta crisis, el primer ministro británico, Tony Blair, ha afirmado que desde 1997, el año que accedió al poder, se han creado 20.000 nuevos puestos en prisiones y que se han aprobado leyes para que haya sentencias más duras para los que comenten delitos. Según el líder laborista ello se traduce en que hay menos espacios en las cárceles.
La situación en las cárceles ha sido criticada por los conservadores. El líder conservador, David Cameron, ha sido muy duro con las críticas al ministerio del Interior, sobre todo por la falta de espacio en los centros penintenciarios.
