R.Unido.- El Gobierno británico estudia llevar la publicidad de comida basura en TV a la noche para frenar la obesidad

Actualizado: viernes, 16 junio 2006 21:21

LONDRES, 16 Jun. (EUROPA PRESS) -

Las elevadas tasas de sobrepeso extremo en Reino Unido han llevado a las autoridades nacionales a plantearse la censura de la publicidad de comida basura en televisión hasta horarios nocturnos. El control sobre los anuncios de los alimentos poco saludables podría extenderse hasta las páginas web, mensajes de texto, juegos de ordenador, cines y pósteres conforme a las decisiones drásticas que proyecta el Gobierno, según publica el diario 'The Guardian'.

Los ministros temen que su propuesta de prohibir la publicidad únicamente en televisión puede derivar en que los anunciantes encuentren otros medios donde difundir sus mensajes y pretenden coordinar medidas para lograr más eficiencia.

Su plan fomentará a tiendas y supermercados a ofrecer tarjetas de fidelidad con bonificación para consumidores que compren alimentos saludables, bajos en sal, azúcar y grasas. También se potenciará el control a médicos de cabecera para ver si pueden dar prioridad a niños obesos.

La presión política y médica cae sobre los ministros para que prohíban la publicidad televisiva de comida basura hasta las 9 de la noche. La alarma del Gobierno sobre la obesidad británica es tal, que su asesor jefe sobre temas científicos, Sir David King, ha encargado un estudio en el que se incluye el posible uso de drogas anti-obesidad para reducir las tallas del cuerpo humano. Los detalles del proyecto se terminarán a final de año.

La ministra de Sanidad, Carolina Flint, expuso ayer, ante expertos en salud en un seminario privado en Westminster, que el Gobierno puede perder su reputación de liderazgo internacional contra la obesidad si acepta las propuestas que incluyen el borrador del regulador de emisiones, Ofcom, que no censura la publicidad de comida basura hasta las 21 horas. Ofcom afirma que el veto costará a las cadenas televisivas cerca de 141 millones de libras (más de 200 millones de euros) en renta publicitaria.

Su departamento, junto con el de Cultura, Comunicación y Deportes, encabezan el foro de discusión entre las compañías alimenticias y los grupos de consumidores para negociar una fuerte regulación para las emisiones publicitarias en horario diurno.

Flint recordó el caso de la prohibición de anuncios de tabaco en la televisión en los años sesenta, que llevó a la publicidad a optar por otros medios de comunicación. La ministra culpó del aumento de la obesidad a "los cambios inevitables en el estilo de vida. Antes, el mejor regalo era una bicicleta y ahora lo es una Play Station. Esa es la realidad" añadió.

La titular de Sanidad constató que el 15% de los 5 millones de niños británicos de entre 2 y 11 años sufren obesidad o algún tipo similar de sobrepeso. "Si no hacemos nada en este sentido, tendremos un millón de niños obesos que le costarán a la Sanidad pública entre 3,3 y 3,7 billones de libras al año (alrededor de cinco millones de euros)" agregó.

Mientras, el profesor Gerard Hastings, director del Instituto de Marketing Social en la Universidad de Stirling, consideró el veto televisivo "totalmente desproporcionado", al igual que a la Unidad de Publicidad Alimenticia, representante de los anunciantes de compañías alimenticias. La Unidad declaró que la publicidad tiene "un modesto efecto (2%) en las preferencias de las comidas de los niños".