R.Unido.- Mueren dos personas durante las inundaciones aunque el nivel del agua se ha estabilizado

Actualizado: jueves, 26 julio 2007 16:22

PURLEY-ON-THAMES (REINO UNIDO), 26 Jul. (EP/AP) -

Dos personas murieron mientras intentaban limpiar un campo de rugby durante las inundaciones que azotan Reino Unido mientras que el temor a que las comunidades situadas a lo largo del río Támesis se inunden se redujo hoy al estabilizarse el nivel del agua, pero cientos de habitantes que luchan aún por limpiar las áreas más dañadas permanecen sin agua potable.

Dos personas murieron en Tewkesbury, una de las áreas más afectadas, mientras intentaban limpiar un campo de rugby después de que éste se inundase, según informaron los bomberos de Gloucestershire. Los bomberos indicaron que se cree que estaban usando una bomba de gas "y posiblemente se intoxicaron con los gases de la bomba".

Los niveles del agua comenzaron a bajar en Oxford, aunque aún permanecen siendo muy altos, y en Reading, al sur de la ciudad universitaria y a unos 70 kilómetros al oeste de Londres, la situación es similar. "Aunque aún son altos, esperamos que permanezcan a ese nivel y caigan después de 48 horas", comentó un portavoz de la Agencia de Medio Ambiente, que prefirió permanecer bajo anonimato.

Windsor, donde se encuentra el castillo del mismo nombre, se espera que se salve de las inundaciones ya que se han dispuesto importantes defensas para evitar que sufra daños, al igual que se espera que Londres también las evite.

La compañía Severn Trent Water está intentando restaurar el servicio de agua en unas 10.000 viviendas aunque sólo servirá para lavar y poder usar los lavabos y no será potable por el momento. En total, unas 350.000 personas se quedaron sin agua después de las inundaciones que comenzaron la semana pasada.

El Gobierno indicó que considerará la suspensión de la recaudación de impuestos a las personas afectadas y la secretaria de Economía, Jane Kennedy, anunció que no se cobrarán las multas por retraso en los pagos de los afectados.

Reino Unido está sufriendo uno de los veranos más húmedos en contraste con el que sufrieron el año pasado, que fue uno de los más secos y calurosos de su historia.