OUAGADOUGOU, 27 Sep. (Reuters/EP) -
Los separatistas tuareg han decidido suspender su participación en el diálogo de paz con el Gobierno de Ibrahim Boubacar Keita, acusando a las autoridades malienses de no respetar lo acordado en Ouagadougou el pasado mes de junio.
"Debido a las múltiples dificultades para implementar el acuerdo de Ouagadougou, principalmente debidas a su no observancia por parte del Gobierno, hemos decidido suspender nuestra participación", han dicho en un comunicado difundido a última hora del jueves.
Los firmantes son los principales grupos separatistas tuareg del país africano: el Movimiento Nacional de Liberación del Azawad (MNLA), el Movimiento Árabe del Azawad (MAA) y el Consejo Supremo para la Unidad del Azawad (HCUA).
Por virtud del acuerdo de Ouagadougou, las partes llegaron a un alto el fuego en Kidal, permitiendo que los separatistas tuareg mantuvieran este bastión, aunque con el despliegue de las Fuerzas Armadas y la creación de puestos de control en las entradas y salidas de la misma.
El acuerdo de Ouagadougou allanó el camino para las elecciones presidenciales que se celebraron el 28 de julio y el 11 de agosto y que dieron la victoria, con un 77 por ciento de los votos, a Keita, que tomó posesión del cargo el 3 de agosto.
Todavía deben celebrarse elecciones legislativas. La primera ronda está prevista para el 24 de noviembre y la segunda para el 15 de diciembre. La campaña arrancará el 3 de noviembre y concluirá el día 22 del mismo mes a medianoche.
CRISIS POLÍTICA
La crisis política en Malí se desató en marzo de 2012, cuando un nutrido grupo de militares descontentos por la falta de recursos suministrados por el Gobierno para combatir al MNLA en el norte del país dio un golpe de Estado.
Aprovechando el caos, los rebeldes tuareg se hicieron con el control de las tres regiones que forman el Azawad --Tombuctú, Kidal y Gao-- y proclamaron unilateralmente su independencia, aunque este movimiento no contó con el reconocimiento de la comunidad internacional.
Sin embargo, los grupos islamistas presentes en el norte de Malí --Al Qaeda del Magreb Islámico (AQMI), el Movimiento de Unidad para la Yihad en África Occidental (MUYAO) y Ansar Dine--, rápidamente expulsaron al MNLA del Azawad para imponer la 'sharia'.
INTERVENCIÓN MILITAR
El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas autorizó en diciembre de 2012, en la resolución 2085, el despliegue de una fuerza internacional --la Misión de Estabilización de la ONU en Malí (MINUSMA)-- para ayudar a las fuerzas malienses a recuperar el control del norte del país.
Ante la lentitud de su despliegue, el presidente francés, François Hollande, autorizó el pasado 11 de enero la intervención militar de su país en Malí para expulsar a los grupos armados, a petición de las autoridades malienses.
El Gobierno francés inició el pasado mes de mayo la retirada masiva de sus tropas, a pesar de que el entonces presidente maliense, Dioncounda Traoré, insistió en que lo "ideal" sería que el país europeo mantuviera "más" de 1.000 militares porque el terrorismo "no ha sido derrotado".