COLOMBO 6 Dic. (EP/AP) -
El Gobierno de Sri Lanka prometió hoy que va a "aniquilar" a los rebeldes Tigres de Liberación de la Tierra Tamil (LTTE) tras la última ola de ataques mortales cometidos por estos que se han saldado con decenas de civiles muertos, el último de ellos ayer contra un autobús en el que murieron 16 personas.
Según el Gobierno, la última ola de ataques contra civiles demuestran que los rebeldes están actuando a la desesperada ante la ofensiva militar del Ejército contra sus últimas bases en las junglas del norte de la isla, después de que las fuerzas de seguridad tomaran el control del este hace unos meses.
"Eso significa que están débiles y desesperados", afirmó hoy el ministro de Información, Anura Yapa. "Estamos intentando lo mejor que podemos destruir a estos terroristas en sus propias áreas", añadió. "Queremos asegurarnos de que son aniquilados y borrados del país", subrayó.
Los rebeldes luchan desde 1983 para la creación de un Estado independiente para la minoría tamil en el norte y el este de la isla, tras décadas de discriminación por los gobiernos dominados por la mayoría cingalesa del país. Más de 70.000 personas han muerto en el conflicto.
En las últimas semanas han ido en aumento los enfrentamientos entre el LTTE y las fuerzas gubernamentales en el norte de Sri Lanka. Según informó hoy el Ejército, los soldados abatieron a cinco rebeldes en dos choques ayer, por lo que el balance total del día fue de 34 Tigres Tamiles y siete soldados muertos. Durante la noche, enfrentamientos en los distritos de Vavuniya y Mannar dejaron otros cuatro rebeldes muertos.
Por su parte, el portavoz del LTTE, Rasiah Ilanthirayan, indicó que al menos diez soldados fueron abatidos cuando los rebeldes repelieron una ofensiva gubernamental que intentaba romper la línea de defensa rebelde en Mannar ayer. Según este portavoz, ningún rebelde murió en el choque, pero sí falleció uno de ellos en otro incidente hoy.