Sudán.- Ban Ki Moon considera los próximos meses "cruciales" para Darfur y exige el fin de la violencia en la región

NUEVA YORK, 5 Ago. (EP/AP) -

El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon, afirmó que, aunque se está desarrollando un escenario adecuado en Darfur para solucionar la crisis armada en la que vive la región sudanesa, el acuerdo político para lograr la paz "no tendrá éxito" si no se pone fin a la violencia que se vive en la localidad.

La advertencia reflejada en el nuevo informe del máximo dirigente de Naciones unidas llega en un momento en el que Naciones Unidas ha aprobado el envío de una fuerza conjunta de cuerpos de paz que se sumarán a los efectivos de la Unión Africana presentes en el país, junto a la reunión que tiene lugar este fin de semana en Arusha (Tanzania) entre las diferentes partes en conflicto para poner fin a los enfrentamientos armados.

El enviado especial de la Unión Africana, Salim Ahmed Salim, afirmó a la cadena de televisión estatal Tanzania Televisión, que la reunión de Arusha es completamente necesaria ya que "los rebeldes carecen de una estrategia conjunta a la hora de negociar con el Gobierno".

Sin embargo, el cabecilla de uno de los principales grupos rebeldes, escindido del Movimiento de Liberación, anunció ayer a la BBC su intención de boicotear las negociaciones, dado que es el deseo del grupo acabar con los enfrentamientos antes de que terminen las negociaciones.

"No es cuestión de que Naciones Unidas dicte otra resolución, sino sobre la implantación de la resolución actual", según Nur, sobre la aprobación del organismo internacional a un nuevo despliegue de tropas en la región africana.

El informe de Ban Ki Moon, entregado el viernes al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, estima en sus conclusiones que los próximos meses son cruciales para Darfur, pero que "mientras perduren las hostilidades en la región, los esfuerzos para alcanzar un acuerdo político y una paz duradera no tendrán éxito alguno".

El secretario general, sin embargo, pone sus esperanzas en el despliegue de la fuerza híbrida ONU/UA, cuya labor dependerá, no obstante, de la colaboración del Gobierno, especialmente a la hora de proporcionarles un espacio adecuado" para su intervención, así como garantizarles permiso para "buscar agua" en el suelo sudanés, y conceder su aprobación en la llegada de material a través de las aduanas.