Suiza.- Una emigrante gallega se convierte en la primera extranjera que opta a la Presidencia del Parlamento de Ginebra

Actualizado: martes, 13 noviembre 2007 16:59

Apuesta por importar a España el sistema suizo y que los emigrantes no voten en municipales, pero sí en autonómicas y generales

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -

Natural del municipio coruñés de Ponteceso pero residente en Suiza desde 1968, cuando emigró a ese país con sólo 17 años de edad, Dolores Volay Cruz se ha convertido en la primera extranjera que opta a la Presidencia del Parlamento del cantón de Ginebra en la votación que se celebrará el próximo jueves.

Con 57 años de edad, Dolores Volay cambió hace 10 años la trayectoria profesional que había desarrollado en la banca y como jefa de personal en una multinacional francesa especializada en productos químicos por la política, cuando salió elegida como diputada por el PSOE en el cantón suizo donde reside.

Tras tres legislaturas como diputada, el próximo jueves aspira a convertirse en presidenta de la Cámara de Ginebra, donde los grupos de izquierda sólo cuentan con los 17 escaños del PSOE y los 15 de los ecologistas de un total de 100 diputados. El resto está en manos de grupos políticos de derecha y de extrema derecha, pero Dolores Volay explicó a Europa Press que se han negociado los apoyos que son posibles gracias a la "política de consenso" que caracteriza a Suiza y que es "la base de la estabilidad" de ese país.

DERECHO DE VOTO.

Esta política socialista, que después de casi 40 años emigrada cuenta con la nacionalidad española y suiza, lucha por que en el país helvético los extranjeros puedan votar en las elecciones nacionales y en las cantonales --el equivalente a los comicios autonómicos--, ya que en Suiza sólo tienen derecho al sufragio en las elecciones comunales, que son como las municipales en el sistema español.

Acerca del sufragio emigrante en España, Dolores Volay cree que sería adecuado importar un sistema similar al suizo, donde los ciudadanos que residen en el exterior sólo puedan votar en los comicios autonómicos y en los generales. En su opinión, un ciudadano en la diáspora "no está al corriente de lo que pasa en su municipio", por lo que cree "normal" que no decida en las elecciones municipales.

INTEGRACIÓN.

El secretario xeral de Emigración de la Xunta, Manuel Luis Rodríguez, y el embajador y el cónsul de España arroparán el próximo jueves a Dolores Volay, que actualmente ejerce como vicepresidenta de la Cámara de Ginebra, en la votación que decidirá la próxima Presidencia.

Después de casi 40 años emigrada, su aspiración es acceder a ese puesto con un discurso sobre "la integración" de los extranjeros en la sociedad suiza, a partir del papel como "tierra de refugio" que jugó Ginebra en los siglos XVIII y XIX y con una apelación a la necesidad que este país tuvo de mano de obra inmigrante desde los años 60 de la pasada centuria.

"Este no sería el país que es sin los emigrantes", aseveró para reclamar que Suiza desarrolle una política de inmigración que no conciba este fenómeno "sólo desde una óptica utilitarista". Así, lamentó que el discurso de la extrema derecha, que reforzó su liderazgo tras su triunfo en las legislativas del pasado mes de octubre, aliente "racismo y xenofobia", pero también hace autocrítica para reconocer que los socialistas tampoco supieron "responder a las llamadas de los extranjeros".

Después de 39 años de residencia en Suiza, esta emigrante gallega asegura que sus compatriotas "están muy bien vistos" en Suiza porque "van a trabajar", pero recuerda momentos "difíciles" al principio porque se encontró con "mucha xenofobia". Paradójicamente, reconoce que en la actualidad "hay personas gallegas con una opinión negativa de la inmigración", por lo que insta a la reflexión.