El Supremo paquistaní investigará si se pidió ayuda a EEUU para frenar un golpe de Estado

Actualizado: viernes, 30 diciembre 2011 13:51


ISLAMABAD, 30 Dic. (Reuters/EP) -

El Tribunal Supremo de Pakistán ha anunciado que investigará el escándalo conocido como 'memogate' en relación a un memorándum en virtud del cual se pidió ayuda a Estados Unidos para contener un probable golpe de Estado del Ejército contra el presidente del país, Asif Alí Zardari.

Según informa la cadena GEO TV, el Supremo ha aceptado la denuncia presentada sobre el caso y ha ordenado la formación de una comisión de investigación que estará integrada por tres magistrados de un tribunal superior y un juez de sesiones y deberá completar su trabajo en un plazo de cuatro semanas.

La decisión ha sido adoptada por nueve magistrados del Supremo, encabezados por su presidente, Iftijar Chaudhry, quienes han escuchado los argumentos reclamando la investigación presentados por el abogado del partido Liga Musulmana de Pakistán-Nawaz (PML-N, que lidera el exprimer ministro Nawaz Sharif).

El 'memogate' ha vuelto a poner de manifiesto las históricas tensiones entre el Gobierno civil y los militares, que han gobernado la mayoría de los 64 años de historia de Pakistán y cuya ayuda es fundamental para Washington a la hora de controlar a los milicianos que operan en el vecino Afganistán.

La escena política paquistaní se ha visto sumida en una profunda crisis después de que el pasado 10 de octubre el empresario Mansoor Ijaz escribiera en el 'Financial Times' que un diplomático paquistaní había pedido la entrega de un memorándum al Pentágono solicitando ayuda a Estados Unidos ante el temor de un golpe de Estado militar después de que la operación norteamericana en la que murió el líder de Al Qaeda Usama bin Laden el pasado mayo.

Ijaz, que es de origen paquistaní, posteriormente identificó al diplomático como el embajador paquistaní en Washington, Husain Haqqani, un estrecho aliado de Zardari, quien negó su implicación pero renunció al cargo en medio de la controversia suscitada.

La decisión de este viernes del Supremo supone una presión añadida para el Gobierno. Asimismo, se está especulando con que una investigación pueda llevar a la caída de Zardari, si se demuestra que existía un vínculo.

El Gobierno ha ido perdiendo popularidad desde que Zardari llegó al poder en 2008 y aunque el Ejército ha asegurado que no tiene planes de derrocarlo, los analistas subrayan que tiene muchos modos de presionar al presidente para que renuncie.

Aunque su cargo es marcadamente ceremonial, Zardari goza de una influencia considerable como líder del partido gobernante y su salida forzosa sería una humillación para el gobierno civil y podría sumir al país en el caos.