MADRID, 18 Feb. (EUROPA PRESS) -
El grupo terrorista Tehrik-i-Taliban Pakistan (TTP) ha amenazado este sábado con más ataques contra las fuerzas de seguridad de Pakistán, un día después de un asalto contra una comisaría en Karachi (sur) que se saldó con cuatro muertos y en medio del repunte de los atentados desde que dieran por roto en noviembre el alto el fuego.
El grupo, que ha reclamado la autoría del ataque en Karachi, ha resaltado que el atentado "es un mensaje a todas las agencias de seguridad antiislámicas de Pakistán". "Los muyahidín continuarán su lucha para la aplicación de la 'sharia' en el país", ha dicho.
"El Ejército y la Policía serán atacados en todos los lugares importantes hasta que se allane el camino para la aplicación de un sistema islámico en el país", ha recalcado, al tiempo que ha pedido a los policías que "se alejen de la guerra contra el Ejército esclavo".
"En caso contrario, los ataques contra los lugares seguros de los altos cargos de la Policía continuarán. Queremos advertir a las agencias de seguridad para que dejen de causar el martirio de presos inocentes en enfrentamientos falsos, o la intensidad de los próximos ataques será mayor", ha zanjado en un comunicado.
Pakistán ha denunciado que TTP utiliza territorio afgano para sus ataques y ha llegado a amenazar con operaciones transfronterizas, algo rechazado firmemente desde Kabul, donde los talibán afganos --que mediaron en el proceso de conversaciones que derivó en un alto el fuego-- han asegurado que trabajan para garantizar la seguridad.
El grupo TTP, que difiere de los talibán afganos en asuntos organizativos pero sigue la misma interpretación rigorista del islam suní, aglutina a más de una docena de grupos de militantes islamistas que operan en Pakistán, donde han matado a unas 70.000 personas en dos décadas de violencia.
