LISBOA, 13 Dic. (De la corresponsal de EUROPA PRESS, Patricia Ferro) -
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, consideró hoy, en la ceremonia de la firma del Tratado de Lisboa, que éste marca "el nacimiento de una nueva Europa" con capacidad para enfrentar los desafíos globales, pero recordó, a los líderes de los Veintisiete, que hay que mantener "el coraje político" demostrado hasta ahora para lograr la ratificación de todos los países.
Barroso que tomó la palabra después del presidente en ejercicio del Consejo Europeo, su compatriota José Sócrates, reconoció que con este Tratado se cierra una grave crisis en Europa y eso se debe "al coraje político mostrado por todos los gobiernos". Sin embargo, dijo, aunque la firma de hoy "es importante" recordó a los líderes de los Veintisiete presentes que ahora se inicia el proceso de ratificación y por eso les pidió que mantengan "el mismo coraje". En mente el Tratado Constitucional Europeo, que se firmó en Roma en 2004 y después fracasó por el "no" en referéndum de Francia y Países Bajos.
El político luso tuvo palabras de reconocimiento para la canciller alemana Angela Merkel que realizó "una contribución excepcional" y para la presidencia portuguesa por su "determinación y competencia".
El presidente de la Comisión indicó que tras resolver los problemas institucionales, Europa "tiene que prepararse ahora para enfrentar los problemas globales". "Ahora es el momento de avanzar. Europa tiene que enfrentar numerosos desafíos, tanto internos como externos, que tienen como denominador común la globalización, y nuestros ciudadanos quieren resultados", afirmó.
Durao Barroso recalcó que el Tratado de Lisboa "refuerza" la capacidad de la UE para actuar y lograr sus objetivos, pero además, "reforzará la democracia y el método comunitario de toma de decisiones, al dar más competencias al Parlamento Europeo", afirmó el presidente de la Comisión.
