BRUSELAS, 9 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea aprobó hoy la adquisición de Danone Biscuits --el negocio de productos de galletas, aperitivos y cereales del grupo francés Danone-- por parte de la empresa alimentaria alemana Kraft. El visto bueno de Bruselas está condicionado a que Kraft venda sus marcas de galletas en España, como Artiach, Chiquilin, Filipinos y Marbú Dorada, y una de sus cuatro plantas españolas de producción, así como una marca de chocolate en Hungría.
Si se cumplen estos requisitos, el Ejecutivo comunitario cree que la operación no tendrá un impacto negativo sobre la competencia en el espacio económico europeo o en una parte sustancial del mismo.
"Teniendo en cuenta las medidas correctoras ofrecidas, estoy convencida de que la competencia seguirá siendo fuerte después de la fusión y de que los consumidores de galletas y de chocolate podrán elegir entre varios productos a precios competitivos", dijo la comisaria de Competencia, Neelie Kroes, a través de un comunicado.
La operación afectará sólo a pocos Estados miembros donde las dos partes venden tanto galletas como productos de chocolate. Por lo que se refiere a las galletas, Danone Biscuits está presente en toda Europa con su marca LU y con otras marcas internacionales, mientras que Kraft vende sobre todo en la Península Ibérica con las marcas Fontaneda y Artiach.
La investigación del Ejecutivo comunitario puso de relieve que la concentración, tal y como se notificó inicialmente, podría haber reducido la competencia de manera significativa en el mercado español de galletas. Bruselas determinó que la empresa resultante se convertiría en el líder del mercado con la mayor cartera de marcas importantes y en un socio comercial inevitable para los minoristas.
Por lo que se refiere a los productos de confitería al chocolate, Danone Biscuits tiene marcas nacionales en Bélgica (Cha-cha); Tatranky, Horalky y Fidorka en República Checa y Eslovaquia y Batalon en Hungría. Por su parte Kraft posee una variedad de marcas internacionales como Milka, Cart d'Or, Toblerone, Suchard y algunas marcas locales.
La transacción original, que crearía un líder de mercado combinando una variedad de marcas fuertes de ambas empresas, amenazaba con impedir una competencia efectiva en el mercado húngaro de productos de chocolate.
Para resolver las "serias dudas" de la Comisión sobre la compatibilidad de la compra con el mercado único, Kraft se comprometió a vender un amplio abanico de marcas de galletas españolas, como Artiach, Chiquilin, Filipinios y Marbú Dorada, así como una de sus plantas de producción en España que el Ejecutivo comunitario no quiso identificar. Por lo que se refiere a Hungría, Kraft se deshará de la marca Batalon.
Tras realizar un test de mercado con estos compromisos, el Ejecutivo comunitario ha llegado a la conclusión de que podrán corregir los problemas de competencia detectados.
