LISBOA, 13 Abr. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Patricia Ferro) -
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, afirmó hoy en Lisboa que es "esencial" que el nuevo Tratado Constitucional sea ratificado por todos los Estados miembros hasta la primavera de 2009 y para lograrlo se mostró disponible para acelerar la celebración de la nueva Conferencia Intergubernamental.
En su encuentro en el Parlamento portugués con diputados de todas las fuerzas políticas en representación de las diferentes comisiones y con miembros del gobierno, como el ministro de Asuntos Parlamentare, Augusto Santos Silva, y el secretario de Estado para los Asuntos Europeos, Lobo Antunes, Durao Barroso indicó los que en su opinión son los cinco puntos esenciales que deben salir del Consejo Europeo de junio, bajo presidencia alemana.
El presidente de la Comisión consideró que en junio todos los Estados miembros "deberán definir el objetivo de que la Unión Europea (UE) disponga de un nuevo tratado en 2009, antes de las próximas elecciones al Parlamento Europeo".
En opinión de Barroso, "el punto de partida deberá ser el tratado ya firmado por todos los Estados miembros y que fue ratificado por 18 países" y la "conferencia intergubernamental deberá ser lanzada lo más deprisa posible", por su parte, indicó, "la Comisión Europea está disponible para acelerar la emisión de su parecer formal" para lanzarla cuanto antes.
El Consejo Europeo de junio "deberá dejar bien especificado" que tipo de materias deben ser discutidas en el proceso de elaboración del nuevo texto constitucional. "Gran parte de su contenido debe ser preservado y es importante no reabrir un gran número de cuestiones", indicó.
El presidente de la Comisión también defendió que entre los nuevos dominios que se deben introducir en el tratado están los temas relacionados con la política energética.
Para Durao, si en junio se estableciese "un calendario ambicioso y claro, eso ya representaría un gran paso" y después le correspondería a la presidencia portuguesa de la UE, en el segundo semestre de este año, "liderar el lanzamiento de la Conferencia Intergubernamental", proceso en el que garantizó "el apoyo y el empeño" de Bruselas.
Respecto a la forma de ratificar el nuevo tratado, Durao defendió que la decisión de hacerlo "por vía parlamentaria o por referéndum es una cuestión exclusivamente nacional". "Para nosotros lo importante es que sea aprobado y una vez firmado que sea ratificado".
Por otro lado, el presidente de la Comisión también habló de la importancia de la solidaridad entre los Estados miembros, porque "sin ella no puede haber unión".
Durante su intervención, que se caracterizó por el optimismo, especialmente en lo que se refiere a los asuntos económicos, Durao Barroso defendió las reformas realizadas en el ámbito de la "renovada" Estrategia de Lisboa que "ya están dando resultados", indicó.
Durao afirmó que el escenario macroeconómico de la UE "es prometedor" e indicó que, hasta 2008, deberán crearse "diez millones más de empleos" en el espacio comunitario".
El presidente de la Comisión insistió durante toda su intervención que el camino de las reformas es el único posible para la Unión Europea.