Celebra el acuerdo en la UE para dar una definición común a las redes de deriva
LUXEMBURGO, 12 Jun. (EUROPA PRESS) -
La ministra de Agricultura y Pesca, Elena Espinosa, aseguró hoy que la reducción del 11% de la cuota asignada a España para la pesca del atún rojo que contempla en el plan de recuperación que ratificó ayer la UE no afectará a los pescadores españoles, debido a que en el pasado no alcanzaron el tope de sus posibilidades de pesca.
"Va a haber reducciones que se van a ir marcando en función de cómo vaya funcionando este plan de recuperación, pero lo cierto es que ya para el año próximo hay una reducción del 11%" en las capturas españolas, dijo la ministra.
Apuntó, sin embargo, que "España nunca superó ni llegó a alcanzar los umbrales de cuota de los que disponía, por lo tanto, esta reducción en teoría no tiene por que afectar a nuestra flota". También queda fuera de estas disposiciones la flota tradicional debido a que "realizan otro tipo de pesquería".
Espinosa se refería al acuerdo que alcanzó ayer el Consejo de Agricultura y Pesca sobre un plan de recuperación que se acordó en noviembre del año pasado en el seno de la Comisión Internacional para el Atún del Atlántico Norte (ICAAT) y que en la UE podrá entrar en vigor mañana, 13 de junio, aunque las tallas mínimas del atún que fija -máximo 30 kilos no lo harán hasta el 30 de junio.
La adopción del plan también supuso la asignación definitiva del total admitido de captura (TAC) y las cuotas nacionales acordadas previamente. De un TAC europeo de 16.779,55 toneladas a España le corresponde una cuota de 5.568,21 toneladas, lo que supone una disminución de 11%, 697,79 toneladas, con respecto a cuota de 2006.
Con el plan de recuperación se espera que las capturas de atún rojo vayan reduciéndose progresivamente desde 32.000 toneladas en 2006 hasta llegar a 25.500 toneladas en 2010.
Incluye también otros elementos que recordó este martes Espinosa, como la reducción de las tallas mínimas, vedas entre los meses de julio y diciembre y más controles en barcos y en la fase de comercialización del atún.
"Lo que pretendíamos era disponer de ese plan de gestión que nos permita tener mecanismos eficaces que lleven a la recuperación de esta especie y que pueda convivir la pesca tradicional que realiza esta pesquería conjuntamente con otras pesquerías de carácter mas industrial", explicó Espinosa.
REDES DE DERIVA
Por otra parte, la ministra se refirió a otro de los acuerdos relativos a pesca que se alcanzaron en la jornada de ayer del Consejo -que continúa hoy--, relativa la definición por parte de la UE de la red de red de deriva, un asunto que, recordó, quedaba "pendiente" en el reglamento de gestión pesquera del Mediterráneo.
A pesar de la oposición de Francia, el Consejo acordó definir a este tipo de red como "toda red de enmalle mantenida en la superficie del mar, o a cierta distancia por debajo de ella, mediante dispositivos flotantes, que derive con la corriente sea de forma independiente, sea con el buque al que vaya fijada. Puede ir equipada con dispositivos destinados a estabilizar la red y/o limitar su deriva".
Espinosa recordó que España, donde no se emplea este arte desde hace "muchos años", "siempre había defendido una definición de estas redes debido a que no son medios de pesca respetuosos con la sostenibilidad pesquera y también perjudican seriamente los stocks pesqueros y el medio marino".
"Lo que pretendíamos es que hubiese una definición clara por parte de la UE que impidiese que otros países estuvieran utilizando estas redes de una forma en unos casos clara y en otros encubierta", dijo la ministra que mostró su "satisfacción" por "colaborar" de esta forma con los principios de "pesca responsable, sostenible y colaborando con el medio ambiente".
