UE.- Los siete socios del ITER dan en París luz verde al proyecto para conseguir una energía limpia

Actualizado: martes, 21 noviembre 2006 17:59

PARIS, 21 Nov. (Del corresponsal de EUROPA PRESS, Javier Gómez Muñoz) -

Los siete socios del proyecto de reactor de fusión termonuclear ITER (Unión Europea, China, Japón, Rusia, India, Corea del Sur y Estados Unidos), que será construido en Cadarache (sur de Francia), firmaron hoy en París el tratado que da luz verde a uno de los proyectos científicos más ambiciosos emprendidos hasta la fecha.

El Reactor Experimental Termonuclear pretende reproducir en la Tierra en proceso de fusión por el que el Sol y las estrellas producen una energía no contaminante e infinita, que podría poner fin a la era del petróleo. Tal empresa requerirá una inversión de 10.000 millones de euros, de los que la mitad será aportada por la Unión Europea.

España, Japón y Francia eran los tres aspirantes que lucharon hasta el final para albergar el ITER. Finalmente, tras varios años de negociación, en junio de 2005 se decidió que fuese Cadarache, cerca de Marsella, la ciudad que acogerá un reactor que no estará finalizado hasta 2018, cuando comenzará su puesta en marcha.

La producción de energía 'limpia' a gran escala no podrá llevar a cabo, sin embargo, hasta dentro de varias décadas. El interés de las grandes potencias es encontrar una fuente de energía que no agote los recursos del planeta, que sea menos cara y no lastre la economía y que respete el medioambiente.

El presidente francés, Jacques Chirac, explicó pedagógicamente que, si el proyecto culmina con éxito, "de un litro de agua podrá obtenerse la misma energía que de un kilo de carbón o de un litro de petróleo". Técnicamente, el reactor pretende conseguir una reacción de fusión entre dos materiales, el deuterio (hidrógeno pesado) y el tritio, ambos presentes en el agua del mar, a cien millones de grados.

El jefe de Estado francés declaró que se trata de una "etapa excepcional" en la ciencia y el progreso del mundo que "tiende la mano a las generaciones futuras, en el nombre de la solidaridad y la responsabilidad". El presidente de la Unión Europea, José Manuel Barroso, destacó que el proyecto ITER responde, al mismo tiempo, a las necesidades futuras en el campo de la energía y también del medioambiente.