Ulster.- Los dos bandos rechazarán mañana el plan para indemnizar por igual a las familias de los muertos del conflicto

Actualizado: martes, 27 enero 2009 15:44

La decisión final sobre la polémica medida, que costaría unos 40 millones de libras, dependería del primer ministro británico

LONDRES, 27 Ene. (EUROPA PRESS) -

El Grupo Consultivo del Pasado nombrado por el Gobierno británico para asesorar en el proceso de paz de Irlanda del Norte topará mañana con un amplio rechazo tanto de unionistas como de republicanos a su propuesta de indemnizar por igual con 12.000 libras (unos 13.000 euros) a las familias de todos los fallecidos por el conflicto que durante décadas se prolongó en el Ulster, incluidos miembros del IRA y de organizaciones leales a la Monarquía consideradas también terroristas.

El grupo presentará este miércoles el informe que contiene una apuesta que, de ser aceptada, tendría un coste para las arcas públicas de unos 40 millones de libras y que, según sus promotores, está diseñada para no realizar distinciones entre las más de 3.000 víctimas que dejó como consecuencia el prolongado enfrentamiento y abordar todos los casos bajo el mismo criterio.

Sin embargo, el avance de la controvertida medida ha provocado ya una cadena de reacciones en contra lideradas por las víctimas del IRA, que consideran una "infamia" que sus casos se igualen a los de los que perecieron cuando intentaban perpetrar un acto criminal. No obstante, también los católicos reprueban el plan, que consideran un intento del Gobierno británico de acallar con dinero su parte de responsabilidad en el conflicto.

El propio ex primer ministro norirlandés y Premio Nóbel de la Paz David Trimble admitió que había "mucha rabia" contra la medida y recordó que "lo que las víctimas quieren es, en primer lugar, ser recordadas y sentir que lo que sufrieron no fue en vano, sino que su sacrificio ayudó a erigir un mejor, más seguro y democrático futuro para Irlanda del Norte". "Empezar así con el dinero es ofensivo", advirtió.

Por su parte, el actual ministro principal del Ulster, el unionista Peter Robinson, declaró que, aunque no había visto el informe, las noticias eran "inquietantes" y avanzó que el Partido Unionista Democrático (DUP, en sus siglas en inglés) "no dará su apoyo a ninguna propuesta que difumine la línea entre un terrorista y una víctima inocente". "Los terroristas murieron llevando a cabo sus actos malvados mientras inocentes fueron llevados por delante por delincuentes sin clemencia ninguna", añadió.

VISIONES CONTRARIAS

Mientras, su socio de Gobierno en la coalición, el republicano Martin McGuinness, se limitó a considerar que el "informe debe ser independiente" y estudiado una vez publicado, frente a su líder en el Sinn Fein, Gerry Adams, quien alertó también de que "hay muchas organizaciones de víctimas que temen que las propuestas permitan al Estado británico continuar con su política de ocultación y encubrimiento".

Entre éstas figura el grupo Familiares por Justicia, relacionado con los supuestos asesinatos de Estado cometidos durante los años del conflicto y que ha declarado ya que las compensaciones pasan por alto sus reivindicaciones, "que no son la reparación o la indemnización, sino la verdad de lo que pasó".

Asimismo, el comisionado de las víctimas también cuestionó la idea de las compensaciones, que podrían "dividir a las familias", y censuró que la propuesta se hubiese filtrado antes de la presentación del informe, "no sólo porque no ayuda en nada, sino porque es perjudicial, particularmente para las víctimas individuales y los que sobrevivieron". "Una vez más las viejas heridas son aireadas, pero no resueltas", añadió.

PROPUESTA

En este sentido, la propuesta es que tanto las familias de las víctimas, como los miembros de las fuerzas de seguridad y los civiles que murieron durante el conflicto que concluyó con el acuerdo de Saint Andrews, firmado en Escocia en 2006 con el desarme definitivo del IRA, verían equiparado su derecho a una compensación económica con el de los parientes de los paramilitares fallecidos.

El grupo de expertos, liderado por el lord norirlandés Robin Eames y por el ex vicepresidente de la Junta de Policía del Servicio de Irlanda del Norte Denis Bradley, nombrados ambos por el Gobierno británico, decidió integrar las indemnizaciones bajo una única pauta cuya resolución dependerá, en última instancia, de la decisión del primer ministro.

Además, el Grupo Consultivo del Pasado apelará asimismo a no abrir nuevas investigaciones públicas relacionadas con las décadas durante las que se prolongaron los enfrentamientos, ni promover una amnistía, y propondrá crear una 'comisión del legado' nombrada por los Ejecutivos británico e irlandés con el objetivo de gestionar durante los próximos cinco años los últimos resquicios del conflicto.