Zimbabue.- Amnistía insta a los dirigentes africanos a "alzar su voz" contra las violaciones de DDHH en Zimbabue

Actualizado: miércoles, 18 abril 2007 15:30

LONDRES, 18 Abr. (EUROPA PRESS) -

Amnistía Internacional (AI) instó hoy a los dirigentes africanos, tanto del ámbito político como de la sociedad civil, que "alcen su voz" contra las violaciones de Derechos Humanos que se cometen en Zimbabue, en particular los ataques "cotidianos" contra los sindicalistas, los activistas por las libertades civiles y los miembros del opositor Movimiento por el Cambio Democrático (MCD).

"Cuando se cumplen 27 años de la independencia de Zimbabue el 18 de abril de 2007, muchos de sus ciudadanos se encuentran bajo custodia policial, o se recuperan de las lesiones que les ha infligido la Policía u otros agentes de seguridad del Estado, o viven atemorizados por atreverse a ejercer su derecho a protestar de manera pacífica", aseguró la organización de Derechos Humanos en un comunicado.

"Muchos pasan la noche sin dormir por miedo a ser secuestrados o torturados, simplemente por haber decidido unirse a un partido político de la oposición", prosiguió.

Desde el año 2000, según Amnistía, la población africana y la del resto del mundo han presenciado la rápida erosión de los Derechos Humanos en Zimbabue, incluida la destrucción generalizada de viviendas y medios de subsistencia pertenecientes a 700.000 personas en 2005.

LAS ÚLTIMAS VIOLACIONES DE DDHH

"Hace poco tiempo, el mundo pudo presenciar las violaciones sistemáticas de Derechos Humanos cometidas selectivamente contra detractores del gobierno en Zimbabue", señaló la organización.

El pasado 11 de marzo, la Policía de Harare disparó y mató al activista local Gift Tandare. Ese mismo día, dirigentes de la oposición política y activistas que intentaban participar en una concentración para la oración en Harare fueron detenidos por la Policía.

Muchas de las personas detenidas, según Amnistía, sufrieron "palizas equiparables a tortura" en la comisaría de Policía de Machipisa, en Harare. Entre las personas heridas estaba Morgan Tsvangirai, el líder del principal partido de oposición, el MCD, quien presentaba fractura de cráneo, y Lovemore Madhuku, de la Asamblea Constitucional Nacional, con rotura de brazo. Grace Kwinjeh y Sekai Holland, ambas activistas del Movimiento por el Cambio Democrático, estaban entre las personas que resultaron gravemente heridas.

La Policía mantuvo bajo custodia a varios activistas heridos de gravedad sin permitirles el acceso a asistencia médica y letrada. En total se detuvo a unos 50 activistas por ejercer pacíficamente su derecho de asociación y de reunión. Tales derechos están garantizados por el artículo 21 de la Constitución de Zimbabue, los artículos 10 y 11 de la Carta Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos, y los artículos 21 y 22 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos.

DIRIGENTES AFRICANOS

Amnistía Internacional considera motivo de "profunda preocupación" que los dirigentes africanos cuyos países pertenecen a la Unión Africana hayan permitido que Zimbabue actúe al margen de las normas de las Naciones Unidas y la Unión Africana en materia de Derechos Humanos. "Han consentido que en Zimbabue prospere una cultura de impunidad en la que son habituales las detenciones, la privación de libertad y las torturas", denunció la organización.

Por ello, Amnistía Internacional desearía que los dirigentes africanos redoblaran sus esfuerzos "para poner fin al sufrimiento en Zimbabue".

Para resolver la crisis de Zimbabue "se precisan garantías de que los autores de violaciones de Derechos Humanos van a responder de sus actos y de que las víctimas tendrán acceso a la justicia", según Amnistía. "Cualquier intento de soslayar las necesidades de las víctimas no puede traer una solución duradera", advirtió AI.

"Por tanto, instamos a todos los dirigentes de África a insistir en que el Gobierno de Zimbabue aplique íntegramente las recomendaciones de la Comisión Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos en su informe de 2002, elaborado tras una visita de investigación al país, como primer paso para abordar la situación de los Derechos Humanos en Zimbabue", concluyó el comunicado.