Zimbabue.- El líder de la oposición abandona el hospital y asegura que seguirá adelante hasta que Zimbabue sea libre

Actualizado: viernes, 16 marzo 2007 14:02

LONDRES, 16 Mar. (EUROPA PRESS) -

El líder de la oposición de Zimbabue, Morgan Tsvangirai, afirmó hoy que seguirá adelante hasta que Zimbabue sea libre, según un artículo suyo publicado en la prensa británica. El líder ha abandonado hoy el hospital, donde ha permanecido cinco días, en silla de ruedas, después de la paliza que recibió por los cuerpos de seguridad el pasado domingo durante su arresto en una concentración pacífica para protestar contra el Gobierno de Robert Mugabe, que le causó fracturas en el cráneo entre otros daños.

Según el artículo del rotativo 'The Independent', el líder opositor, de 54 años, ha pedido a la comunidad internacional que mantenga la presión sobre el régimen de Mugabe. "Sí, han brutalizado mi cuerpo, pero nunca romperán mi espíritu", escribe Tsvangirai, uno de los heridos durante la concentración del domingo, en la que además un activista falleció de un disparo.

"Lejos de asesinar a mi espíritu, las cicatrices que me han inflingido brutalmente me han dado más energías. No busco ser mártir. Busco sólo una nueva Administración para mi país en el que los ciudadanos vivan libremente en prosperidad y teman a sus mandatarios", expresa.

Asimismo, la misiva agradece a los diplomáticos que asistieron al tribunal para estar presentes durante la declaración de los activistas de su partido y pidió la continuación del apoyo internacional. "Necesitamos el apoyo del mundo", pidió.

Por su parte, el vicesecretario de Estado británico del Ministerio de Asuntos Exteriores, David Triesman, acusó al Gobierno de Mugabe de haber cometido "actos que están al borde de los crímenes contra la humanidad".

Mientras tanto, Mugabe envió ayer un mensaje a los países occidentales, mandándoles "al carajo" por sus críticas y culpando de la creciente violencia a la oposición.

Triesman descartó la intervención militar en Zimbabue para poner fin a la alarmante situación en que se ve envuelta el país, con la supresión del partido de Tsvangirai, Movimiento por el Cambio Democrático (MCD), y la expulsión desde 2005 de miles de personas de las zonas urbanas, a lo que se suma la escasez de alimentos, la especulación y la inflación más alta del mundo, que este año alcanzó casi un 1.700%.

Sin embargo, el británico pidió que se identifique a los responsables del asalto al líder opositor y otros 50 activistas del MDC, para que se les agregue a la lista de personas que tienen prohibida la entrada y congeladas las cuentas en la Unión Europea.

Tsvangirai fue arrestado junto a otros activistas democráticos después de que la Policía tratara de disolver el domingo pasado una manifestación no autorizada. Dos días después apareció ante un tribunal con la cara destrozada, una gran herida en la cabeza y puntos de sutura. Los médicos sin embargo, informaron de que el líder opositor no ha sufrido daños cerebrales permanentes, pese a que tiene el cráneo fracturado.

No opina lo mismo en cambio el portavoz del líder, William Bango, quien confirmó que Tsvangirai sufre aún fuertes dolores. Otros cuatro activistas del partido permanecen ingresados aún en el hospital tras su paso por comisaría el domingo.

Más del 80 por ciento de los zimbabuenses viven en la pobreza a causa de las difíciles condiciones económicas, el desempleo crónico y la inflación.