SANTA CRUZ DE TENERIFE, 3 Abr. (EUROPA PRESS) -
La consejera de Sanidad del Gobierno de Canarias, Mercedes Roldós, señaló hoy que la auditoría realizada hace tres años por cirujanos de Barcelona al servicio de cardiología del Hospital Universitario de Canarias (HUC), en Tenerife, nunca pidió el cierre de la unidad, ni solicitó tampoco la suspensión cautelar del servicio, ni hizo ningún trámite para retirar a ninguno de los médicos.
Roldós hizo estas declaraciones tras la inauguración de las Jornadas Técnicas de Preparación Pandémica, en la sede de Presidencia del Gobierno de Canarias en Santa Cruz de Tenerife.
Abogó además por mandar un mensaje de "tranquilidad" a los pacientes y a los familiares porque los datos que se manejan en este servicio médico demuestran que el nivel de mortandad es similar a la media nacional (un 0,7%), según manifestó la consejera.
Recordó que tras la auditoría hecha al servicio de cardiología del HUC se pusieron en marcha 35 medidas para garantizar la atención médica y las prestaciones necesarias a los enfermos del corazón.
"No tengo nada que ocultar y los médicos del HUC, así como el hospital cuentan con mi plena confianza", manifestó rotunda Mercedes Roldós quien recordó que la próxima semana hará una comparecencia en el Parlamento canario a petición propia para informar sobre este asunto.
La popular criticó a los socialistas pues habiendo tenido acceso al informe hace cinco meses y haber solicitado "mi" comparecencia lo hayan ido retrasando "una y otra vez" sin conocer las razones.
Todas estas manifestaciones surgen después de que se diera a conocer una auditoria del servicio de cardiología del HUC hace 10 días en la que se recogía que entre los años 2005 y 2006 el nivel de fallecimientos en el quirófano triplicaba la media nacional.
