27-M.- El PR plantea un decálogo para que la administración regional sea "transparente" y se deje "el nepotismo" del PP

LOGROÑO 23 May. (EUROPA PRESS) -

El candidato del PR a la presidencia del Gobierno de La Rioja, Miguel González de Legarra, planteó hoy, si llegan al Ejecutivo regional, un decálogo de actuación para que la administración de la Comunidad Autónoma sea "transparente" y se deje "el nepotismo y la prepotencia" del PP.

En una rueda de prensa, en la que compareció junto con el número 4 de la lista regionalista al Parlamento, Angel de Jaime Baró, Legarra incidió en que "hay que recuperar la dignidad y la decencia" en la administración regional, que, a su juicio, se ha perdido "con escándalos como las oposiciones de celadores o las presididas por el alcalde de Huércanos".

"¿Cuánta gente más se ha colado sin que lo sepamos o sin que haya habido alguien que se haya atrevido a denunciarlo?", se preguntó el candidato del PR, quien aseguró que su partido "acabará con el sistema con el que actúa el PP, que está dando jefaturas de servicios a sus amigos, primero con comisiones de servicios, y luego con oposiciones hechas a su medida".

Para Legarra, "hay que eliminar la prepotencia y el nepotismo con el que ha venido actuando el PP en la administración riojana, basta ya de castas y privilegios, hay que acabar con los favores a unos pocos en favor de que los ciudadanos recuperen su espacio en la administración y en favor de la transparencia".

Por su parte, De Jaime detalló los puntos que el PR incluye en su decálogo, que se inicia por el reconocimiento "de que los trabajadores de la administración lo son de la Comunidad Autónoma, de del Gobierno del partido que sea", a lo que sumó la valoración "del mérito y la capacidad para el acceso a los puestos y no su filiación política o relación personal".

En tercer lugar, apuntó "que a los funcionarios se les debe exigir en su trabajo lealtad, pero no sumisión", además de que "entendemos que, en la lealtad, hay espacio para la discrepancia razonada". Incidió en que "los funcionarios estarán solamente al servicio de los ciudadanos y del interés general" y que se apoyará "su trabajo imparcial y responsable".

El facilitarles la actualización de conocimientos y la conciliación de la vida familiar y laboral; el fomento de la progresión profesional y la promoción interna; la adecuada valoración y justa retribución por su trabajo; y una jubilació digna "con posibilidad de anticipación y parcialización" completan las propuestas.

"De este modo, los ciudadanos van a poder tener la seguridad de que la función pública va a estar al servicio de todos, como es su tarea, y no al servicio de los intereses de unos pocos", finalizó De Jaime Baró.