LOGROÑO 17 Nov. (EUROPA PRESS) -
Carlota Castrejana, afirmó hoy "que la vida después del deporte es muy dura", meses después de haber puesto fin a su carrera deportiva tras los Juegos Olímpicos de Pekín.
La saltadora de triple salto recibió de manos del alcalde de Logroño, Tomás Santos, una placa conmemorativa de su destacada trayectoria deportiva, en la que se incluyen un Campeonato de Europa en pista cubierta en 2007, la actual plusmarca española en la especialidad y la participación en cuatro olimpiadas, como hechos más relevantes.
"Sin ningún género de dudas es la mejor riojana de la historia", subrayó Santos, que estuvo acompañado durante el encuentro en el Ayuntamiento por los concejales de Participación Ciudadana y Deportes, Inmaculada Sáenz y Atilano de la Fuente, respectivamente, y el gerente de Logroño Deporte, José Luis Gilabert.
PREMIO
Castrejana recibe esta tarde en Madrid el premio a la mejor atleta de la Comunidad de Madrid en 2008. "Ya les he repetido una y mil veces que soy riojana y logroñesa", dijo una sonriente Castrejana.
En la actualidad, la atleta compagina su trabajo en el despacho de abogados de Gómez-Acebo&Pombo en Madrid con su labor de promoción de la candidatura de Madrid 2016 en calidad de miembro del Comité Olímpico Español. En octubre estuvo en Bali trabajando para la candidatura española, "que va a tener una difícil competencia con Río de Janeiro", una de las principales favoritas, en su opinión.
"Intento sacar tiempo libre todas las semanas para hacer deporte", dijo Castrejana, quien reconoció que suele correr por las tardes por calles y parques de Madrid, ciudad en la que reside.
REGRESO
Castrejana descarta en principio su regreso a la alta competición. Sobre las razones que, en su opinión, motivan la vuelta de destacados deportistas tras años de inactividad, como es el caso del ciclista Lance Armstrong, se debe a que "la vida después del deporte es muy dura".
La baloncestista en sus comienzos insistió que, después de un descanso de tan sólo unos meses, "no te duele nada", cuando la actividad deportiva diaria ocasiona intensas molestias. "Ahora no me duele nada", dijo. "Mis molestias en el talón de Aquiles han desaparecido", concluyó.