LOGROÑO, 6 Abr. (EUROPA PRESS) -
La titular del Juzgado de lo Penal número 2 de Logroño ha condenado a un total de 900 euros de multa y la retirada del carné de conducir durante un año por ir al volante de su vehículo por la N-232 bajo los efectos de las bebidas alcohólicas.
Según los hechos probados en la sentencia, el acusado, E.M.V., circulaba sobre las 19:40 horas del 10 de febrero pasado, en su vehículo, marca Hyunday Terracan, por la carretera N-232, en el término municipal de Ausejo, "tras haber ingerido bebidas alcohólicas en tal cantidad que disminuían sus facultades psicofísicas para circular correctamente".
Así, en el punto kilométrico 390, aproximadamente, circulaba con las luces largas accionadas de continuo, lo que motivó que diversos conductores que circulaban en sentido contrario le diesen ráfagas de luz.
Tras ser apreciado este hecho por una patrulla de la guardia civil, que le seguía, se acercaron al vehículo, momento en el que se dieron cuenta de que circulaba con las luces largas y oscilando de línea en línea de la calzada, invadiendo parcialmente el carril contrario de circulación.
El conductor presentaba como síntomas olor muy fuerte a alcohol, frases repetitivas y ojos brillantes y palidez. Al ser sometido a la prueba de alcoholemia, arrojó un resultado positivo de 0,64 miligramos de alcohol por litro de aire expirado a las 19:48 horas, y de 0,58 miligramos de alcohol por litro de aire expirado a las 20:06 horas.
La juez considera en la sentencia que estos hechos son constitutivos de un delito contra la seguridad del tráfico, por lo que condena al acusado a multa de seis meses, con una cuota diaria de 5 euros, y a la privación del derecho a conducir vehículos de motor y ciclomotores por un año.
