La empresa riojana Arluy elabora la primera galleta certificada con el sello de Comercio Justo en España

Actualizado: domingo, 30 septiembre 2007 12:12

LOGROÑO, 30 Sep. (EUROPA PRESS) -

La Asociación del Sello de Productos de Comercio Justo ha concedido el uso del Sello 'Fairtrade' a las nuevas 'Solidary Biscuits', las primeras galletas españolas en conseguirlo. Elaboradas por la empresa riojana Arluy, sus dos ingredientes principales, cacao y azúcar, proceden de pequeños productores de Comercio Justo ubicados en países en vías de desarrollo.

Según indicó la empresa, Arluy adquiere el cacao y el azúcar según las normas estipuladas por FLO (Fairtrade Labelling Organizations), la organización encargada de controlar que en la producción se hayan seguido las pautas básicas del Comercio Justo. La Asociación del Sello de Comercio Justo es una de las 21 organizaciones miembros de FLO en el mundo.

Las normas de FLO garantizan un precio mínimo al productor que le permite vivir dignamente, la paga de una prima de desarrollo, la pre-financiación de los pedidos, y el establecimiento de una relación comercial entre ambas partes a largo plazo.

En este caso, la duración de la relación comercial entre Arluy y las cooperativas suministradoras de cacao (República Dominicana) y azúcar (Paraguay) será de 1 año y se renovará anualmente de manera automática.

Además, el pago de la 'prima al desarrollo' que realiza Arluy al adquirir los ingredientes se destinará a realizar inversiones comunitarias en materia de sanidad, formación, vivienda, educación, etcétera.

En definitiva, la compra de estas galletas supone una pequeña contribución a garantizar un salario digno y una mejora de las condiciones laborales para los productores de zonas empobrecidas de los países del Sur. Para Arluy, este nuevo producto se incluye dentro de su plan de Responsabilidad Social Corporativa.

Las galletas 'Solidary Biscuits' están elaboradas con cacao y bañadas en chocolate blanco. En total, hay 8 galletas diferentes que llevan impresas las caras de niños y niñas de diversas etnias.

Estas galletas pueden adquirirse en las grandes superficies comerciales del país, además de los establecimientos de 'duty free' de los principales aeropuertos nacionales e internacionales.

'Solidary Biscuits' ayuda también a difundir la labor de los agricultores y a concienciar a la sociedad sobre la trascendencia que tienen estas actividades para el crecimiento de las regiones más desfavorecidas. En cada paquete se pueden leer diferentes historias sobre los productores y las cooperativas que producen el cacao y el azúcar destinados al Comercio Justo.

Una de estas historias es la de Ovidia, una agricultora de cacao de la República Dominicana, que en la actualidad tiene 70 años y es madre de 4 hijos. Ovidia vende el cacao a su asociación de agricultores que, a su vez, es miembro de la Cooperativa de Agricultores Conacado. Esta agricultora lidera un grupo de mujeres que se reúne dos veces al mes para destinar el dinero recaudado a diferentes proyectos sociales.

El diseño de los paquetes de 'Solidary Biscuits' está basado en la idea de "la unión de los niños y razas del mundo, en un planeta más justo y solidario". En la cara principal del envase aparecen varios niños con sus manos entrelazadas formando un círculo alrededor del planeta Tierra, y la palabra 'juntos' en varios idiomas.

ARLUY.

Arluy es una empresa galletera familiar que combina los conocimientos y la experiencia de varias generaciones. Inició su andadura en el año 1959 y, en la actualidad, es la primera empresa galletera de La Rioja y una de las primeras de España, lo que permite dar empleo a 130 trabajadores.

Entre sus productos, cuenta con más de 25 variedades diferentes de galletas, que comercializa en los mercados de 45 países, entre los que se encuentran países miembros de la Unión Europea, Japón, México, República Dominicana, Corea, Australia, Colombia, Estados Unidos o Rusia.