MADRID 12 May. (EUROPA PRESS) -
El debate que protagonizaron hoy los candidatos de PP, PSOE e IU a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, Rafael Simancas e Inés Sabanés, respectivamente, emitido por la cadena de televisión pública Telemadrid "ha nacido muerto" debido al formato de tres debates a dos, lo que ha hecho que la primera hora del programa se desarrollara de forma "lenta y aburrida".
Así lo aseguró el socio-director de Mas Consulting Daniel Ureña quien, en declaraciones a Europa Press, explicó que el debate fue "poco atractivo" comparado con el que tuvo lugar el día anterior entre los candidatos de los principales partidos políticos a la Alcaldía de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, Miguel Sebastián y Ángel Pérez, que se llevó a cabo "con ciertas dosis de espectáculo".
El experto mantuvo que la primera hora de debate, en la que se enfrentaron Aguirre y Sabanés y, posteriormente, Simancas y la candidata de IU, "resultó gris y floja", debido a que cada cabeza de lista se dedicó a "exponer sus propuestas". "Es un eufemismo hablar de debate en este caso", apuntó.
Ureña señaló que lo que dio "vidilla" al programa fue el enfrentamiento Simancas-Aguirre, donde los golpes bajos entre ambos candidatos cobraron protagonismo. "Esperanza ha iniciado su discurso diciéndole a Simancas que repite una y otra vez la misma cantinela en la que afirma que ella trabaja para los ricos y recordándole las cenas caras del vicepresidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) Carlos Arenillas. Estas cosas hacen atractivo el debate", apostilló.
AGUIRRE, MÁS CERCANA QUE SIMANCAS
El socio director de Mas Consulting aseguró que a lo largo del programa la actual presidenta de la Comunidad de Madrid "estuvo más cercana que Simancas", ya que el socialista dedicó algunos momentos de su intervención a "leer papeles".
Sin embargo, elogió la actuación del candidato socialista ya que "parecía que estaba muy bien documentado y se había preparado el debate a conciencia". "Lo peligroso de elaborar tanto un espacio como éste es que pierde el golpe de efecto", añadió.
Los tres candidatos presentaron sus propuestas ante un decorado que dibujaba con luces la bandera de la Comunidad de Madrid, en la que predomina el rojo de fondo y el blanco en las siete estrellas. Según Ureña, este detalle "ha podido despistar al espectador". "Hubiese sido más adecuado emplear un fondo más sobrio o neutro, como el azul que se utilizó en el debate del día anterior", indicó.
TRES ESTILOS DIFERENTES
Vestidos para la ocasión, cada uno de los protagonistas del debate quiso llamar la atención de una forma diferente: Aguirre, con "un estilo elegante"; Simancas, con una corbata roja "como las que lucen los candidatos presidenciales americanos", y Sabanés con un 'look' de ejecutiva.
La presidenta de la Comunidad de Madrid vestía con una chaqueta blanca de manga francesa, con líneas rosas dibujando cuadros, bajo la que la asomaba una camiseta rosa de escote palabra de honor, conjunto que cerraba una falda de vuelo negro y unos zapatos de puntera abierta con un tacón que bien podía superar los diez centímetros, lo que le permitía parecer más alta que sus oponentes cuando el plano visual era general.
"Esperanza es fiel a su estilo", matizó Ureña, que destacó la presencia de una bandera con los colores de la bandera de España en la muñeca derecha de Aguirre. "Es un detalle bastante significativo, al igual que los pendientes en forma de estrella que luce en el cartel electoral", agregó.
Simancas, que abandonó su ya conocido traje gris, vestía un dos piezas negro, con camisa blanca y corbata roja que entonaba con el decorado. Para el experto, el socialista imitó al alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, quien el día anterior lució una de tonos similares. "Es un color que sienta bien en televisión", dijo.
Finalmente, Sabanés portaba un traje de chaqueta negro, con una camisa de cuello redondo blanca y zapatos planos, estilo "conservador" parecido al que presenta en su publicidad electoral.