MADRID 26 Jun. (EUROPA PRESS) -
La portavoz del Grupo Parlamentario de IU en la Asamblea de Madrid, Inés Sabanés, aseguró hoy que la decisión de la Comisión Europea de reactivar, con carácter urgente, el caso de la ampliación de la M-501 y llevar el asunto al Tribunal de Luxemburgo, "obedece a la desconfianza que el gobierno de Aguirre ha provocado en Europa, por su actitud desafiante, y hasta chulesca".
Sabanés aseguró, además, que estas desconfianza está provocada también por sus "continuos incumplimientos de la normativa medioambiental y los procedimientos establecidos" y por su intento de llevar a cabo "una política de hechos consumados". "Para ello no duda en resistirse sistemáticamente a la aplicación de las sentencias que demuestran que esta obra es, desde sus orígenes, ilegal", apostilló.
A su juicio, esta situación, "este continuo desafío a los Tribunales y a las normas está provocando una situación grave y un desprestigio de las instituciones madrileñas en el ámbito europeo", y denunció que el Gobierno regional ha intentado presionar a Europa de muchas formas y utilizando distintos medios, "entre ellos los alcaldes de los municipios afectados".
Sabanés también hizo referencia a la salida del hasta ahora consejero de Transportes, Manuel Lamela, "que nunca ha asumido sus errores y mantenido una posición provocadora y desafiante con este tema".
"La gestión de Lamela ha sido nefasta y hoy se pone en evidencia de una forma rotunda", añadió la portavoz de IU, quien entendió que su marcha del Ejecutivo también ha podido estar influenciada "por los continuos varapalos judiciales que están sufriendo estas obras de ampliación, que desde sus inicios se han saltado toda la normativa medioambiental autonómica, estatal y europea".