MADRID, 13 Sep. (EUROPA PRESS) -
El espacio 'Abierto X Obras' de Matadero Madrid continúa con el programa de intervenciones artísticas, iniciado el pasado mes de junio, con el objetivo de incentivar el carácter experimental de la creación a través de diversos planteamientos y estrategias que exploran la relación entre el arte y el lugar.
Dentro de esta línea, 'Abierto x Obras' acogerá hasta el próximo 4 de noviembre el proyecto del artista lisboeta Francisco Tropa 'La Asamblea de Euclides', informó hoy el centro.
La antigua cámara frigorífica de Matadero, transformada en un singular campo de operaciones, entraña la complejidad y el desafío de confrontar los condicionantes de un espacio no convencional que encierra un potencial ingente para desarrollar y repensar las prácticas artísticas del presente.
El propio artista, Francisco Tropa, junto a la directora general de Proyectos Culturales del Ayuntamiento de Madrid, Cristina Conde de Beroldigen, y la responsable de contenidos de Matadero Madrid, Teresa Velázquez, ha presentado hoy el proyecto que comprende dos piezas significativas en la trayectoria del artista portugués, desarrolladas en el marco del proyecto 'La Asamblea de Euclides', que se presenta por vez primera en toda su extensión.
El conjunto integra en la arquitectura del pasado tres construcciones diferenciadas que comparten una concepción escénica del espacio, dos de ellas forman parte de 'El Trance del ciclista', mientras la tercera corresponde a la pieza denominada 'La marca del seno'. "Estos tres espacios funcionan a manera de escenarios, contribuyendo a sugerir el carácter anticipatorio de una acción que, asociada a la fugacidad del momento de la representación, permanece en suspenso".
Como en el teatro, la acción tiene lugar los sábados, a las 20.00 h. y domingos, a las 12.00 h. y se incorpora para interpelar al espectador como un elemento más que activa los dispositivos que le harán partícipe del proceso de gestación de una imagen en todas sus secuencias, desde su puesta en escena, encuadre, registro y concreción física, hasta su proyección inmaterial y simbólica.
TRES CONSTRUCCIONES DIFERENCIADAS
En 'El trance del ciclista', Tropa retoma un género vinculado a los inicios de la fotografía, el retrato de estudio a la vieja usanza, recurriendo al decorado, un fondo de paisaje, y a una bicicleta, que emula los soportes que antaño se utilizaban para posar aunque, en este caso, en vez de contribuir a que el retratado permanezca inmóvil ante la cámara, invita a lo contrario. La imagen resultante, captada y positivada en tiempo real, detiene el momento dilatado que da título a la obra, el trance que transforma al ciclista en un espectro.
'La marca del seno' incorpora el movimiento en la propia imagen, "como si el procedimiento fotográfico se absorbiera y reencarnara en otros medios". El tiempo diferido que ha fijado la imagen en papel es rebasado por ese otro tiempo que esculpe la materia y hace de sus cicatrices una fuente inagotable de referentes. El rastro de un cuerpo encontrado en las ruinas de Pompeya, cobra en la pieza una presencia que entraña algo de la verdad de lo universal. La memoria rescata una huella y filtra a través de una cámara oscura una imagen que se proyecta, quizás desde el subconsciente, en el espacio real y simbólico.
Por último, 'La Asamblea de Euclides', que se presentará los sábados a las 20h. y domingos a las 12h. desde el 12 de septiembre hasta el 4 de noviembre, es una metáfora del proceso creativo que al poner en funcionamiento la mecánica invisible que alumbra las imágenes profundiza el espacio de percepción del espectador descubriéndole un horizonte sensible a la sutil oscilación del tiempo, a la acción improvisada del cuerpo en movimiento, a la memoria que resiste la erosión, a lo contingente e inevitable que acecha los senderos sinuosos y complejos de la creación y de nuestra existencia.