El alcalde defiende que el presupuesto anulado de 2003 tuvo un superávit de 600.000 euros

EUROPA PRESS

PARLA 22 Feb. (EUROPA PRESS) -

El presupuesto del Ayuntamiento de Parla correspondiente al ejercicio de 2003, anulado por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), tuvo un superávit de 600.000 euros, según ha manifestado el alcalde del municipio, el socialista José María Fraile.

El regidor parleño ha recordado que "asumen" la decisión judicial, pero defiende que "no hubo informe negativo o desfavorable por parte de Intervención a la liquidación" de esas cuentas, que arrojaron "un superávit presupuestario de 600.000 euros".

Al respecto el alcalde ha asegurado que "se ha impugnado (el presupuesto) porque no hubo equilibrio presupuestario", pero que en realidad ese superávit en las cuentas municipales demuestran que en 2003 "se hizo buen ejercicio económico" y sí hubo equilibrio.

Fraile se ha referido también al presupuesto del año 2009, que también fue anulado judicialmente, y ha asegurado que al igual que el de 2003 está ejecutado, liquidado y "bendecido por el Tribunal de Cuentas y la Cámara de Cuentas", que auditaron esos presupuestos.

El primer edil ha añadido que "no va a gastar dinero de la Justicia" ya que a su juicio "no tiene sentido" recurrir las sentencias del Tribunal Supremo y del Tribunal Superior de Justicia de Madrid que anulan los presupuestos de 2009 y 2003 respectivamente, puesto que se trata de cuentas liquidadas.

LOS PRESUPUESTOS, ANULADOS POR LA JUSTICIA

El presupuesto de 2003, de la época en la que el secretario general del PSM Tomás Gómez aún era alcalde del municipio, ha sido anulado por la sección segunda de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, cuya sentencia, conocida a principios de este mes, señala que no se cumple el "equilibrio y la estabilidad" exigidos ni las "obligaciones de nivelación presupuestaria".

En el caso de las cuentas de 2009, una sentencia del Tribunal Supremo del pasado mes de noviembre confirmaba otra anterior del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, de febrero de 2011, en la que se anulaban esos presupuestos debido a que no se habían liquidado las cuentas de los ejercicios anteriores, 2007 y 2008, con lo que se habría "omitido información" a los concejales de cara al presupuesto de ese año.