Archivo - Exterior de un piso turístico en el centro de Madrid - Jesús Hellín - Europa Press - Archivo
MADRID, 5 Nov. (EUROPA PRESS) -
El delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, ha defendido que el Plan Reside es "una normativa dirigida a los vecinos" pero sin pretender que las viviendas de uso turístico (VUT) legales desaparezcan.
Desde las instalaciones del Centro Municipal de Acústica (CMA), Carabante ha contestado al más de un centenar de propietarios de VUT que se han unido en una demanda colectiva contra el Plan Reside para defender "la seguridad jurídica, la igualdad de trato y el derecho a una ciudad abierta, donde la riqueza del turismo llegue también a las familias madrileñas".
El delegado se ha dirigido en primer lugar a los partidos de izquierda, que le acusan de "hacer una normativa a la medida de los propietarios, de los privados" pero "lo que pone de manifiesto este recurso es que quien está junto con los propietarios y, por tanto, con la iniciativa privada es precisamente la izquierda, que también anuncia recursos".
"Esta es la prueba de que hemos hecho una normativa dirigida a los vecinos. Nosotros queremos que los vecinos puedan vivir en el centro de Madrid, que esa desaparición de la vivienda por la presión turística no se produzca y por eso el Plan Reside ayuda al vecino frente a estas empresas de instalación de viviendas turísticas", ha defendido.
También ha aclarado que el equipo de Gobierno no busca la desaparición de las VUT legales porque "hoy uno de cada tres turistas que duerman en Madrid lo va a hacer en una vivienda turística y, por tanto, no se puede prescindir de ellas".
"Lo que tenemos que hacer es ordenarlas para que no haya problemas de convivencia y por eso en este modelo del Plan Reside donde viven los madrileños no dormirán los turistas, con un modelo de edificios independientes para que esos problemas de convivencia no se produzcan", ha recordado.
Carabante ha avanzado que la próxima semana aportará datos con la "reducción importante" que se ha registrado ya en los alquileres de VUT, tanto en las plataformas como también en el registro propio de la Comunidad de Madrid, con ocasión de la aprobación del Reside y del endurecimiento del régimen sancionador dado que las multas han pasado de los 1.000, 2.000, 30.000, 60.000 y hasta 100.000 euros hasta los 190.000. "Lo que está haciendo es que los propietarios de VUT ilegal las retiren del mercado por unas multas ejemplarizantes", ha sostenido.