MADRID, 4 Jun. (EUROPA PRESS) -
La sección sindical de CC.OO. del Ayuntamiento de Madrid aseguró hoy que el alcalde de la capital, Alberto Ruiz-Gallardón, subió los salarios de concejales y altos cargos un 11,7 por ciento el año pasado, por lo que la "pretendida" bajada de un 15 por ciento aprobada el pasado 28 de mayo en el Pleno "deviene en una ridícula rebaja real del 3 por ciento".
En un comunicado, la plataforma sindical aseguró que "en plena crisis económica" el Ejecutivo local decidió subir los sueldos de los altos cargos y ediles casi un 12 por ciento y, ahora, organiza una "insultante e hipócrita operación de propaganda electoral" cuya factura pagan los empleados municipales.
"Al tiempo que nuestros gestores municipales actúan con sus salarios de este modo, las medidas anunciadas por el alcalde representan una rebaja cercana al 13 por ciento en términos de masa salarial y, por tanto, un empobrecimiento severo de la plantilla municipal en su conjunto", añadieron desde CC.OO.
Según sus datos, la bajada salarial impuesta por el Real Decreto Ley del Gobierno central supondrá 60 millones de euros de ahorro para el Consistorio, que sumados a los 63 millones de la retirada de los fondos de negociación colectiva y los 29,7 millones de la amortización de 1.188 puestos de trabajo este año supondrá un ahorro total de 152,7 millones, es decir, un 12,73 por ciento menos de masa salarial.
"Estas medidas económicas, adoptadas en contra de los empleados públicos municipales, de dimensiones brutales y desconocidas hasta la fecha, vienen acompañadas del mantenimiento de la extensa, carísima e ineficaz red de altos cargos y directivos que se mantiene intacta --sólo cuatro menos de unos 400--, así como del ejército de consejeros, vocales asesores, asesores, jefes de gabinete, de protocolo y demás puestos eventuales, de libre designación o en comisión de servicios, muchos de ellos correligionarios traídos de otras administraciones --en total unos 1.500 puestos--", reprocharon
Por ello, desde el sindicato concluyeron que el Consistorio madrileño hace a los trabajadores "pagadores exclusivos de la crisis" de una forma "exagerada e innecesaria" y "con unos niveles de injusticia social sin parangón".
