MADRID, 12 Nov. (EUROPA PRESS) -
El vicealcalde de Madrid, Manuel Cobo, aseguró hoy que "todos" sus cargos están a disposición del presidente del PP, Mariano Rajoy, del alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, y de la dirección nacional de su partido, y afirmó que él no pedirá explicaciones sobre cualquier tipo de decisión que cualquiera de estas tres instancias puedan tomar acerca de su permanencia en puestos de responsabilidad.
En la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno, el vicealcalde respondió a toda una batería de preguntas sobre su polémica entrevista criticando a la presidenta autonómica, Esperanza Aguirre, tres semanas después de que fuera publicada y apenas diez días después de su suspensión cautelar de militancia, decretada por el Comité nacional de Derechos y Garantías del PP. Según Cobo, aún no ha tenido noticias sobre la decisión definitiva de este órgano.
Así, el edil indicó que, al margen de la entrevista, él siempre ha "tenido muy claro que los cargos, incluida la afiliación, siempre están a disposición" de su "jefe directo", el primer edil; y también de Rajoy y del partido. Además, en el caso de portavoz del Grupo Municipal Popular existe una tercera vía, que es la de que sus propios compañeros de filas sometan a votación su continuidad, como ya ocurrió, porque él acataría cualquiera de estas decisiones "sin pedir explicaciones"
"Tengo muy claro, y lo voy a seguir teniendo, que mis cargos, todos los que tengo incluida la afiliación, están siempre a disposición de mi jefe directo, Alberto Ruiz-Gallardón; del presidente del PP, Mariano Rajoy, y de la dirección nacional del partido. Siempre. No es una critica a nadie; es mi sentimiento. Y cuando a mí y al resto nos incluyen en una lista, electoral por ejemplo, no pedimos explicaciones de por qué, así que el día que te quitan tiene que ocurrir lo mismo, sin ninguna condición, cero. No tengo ningún problema en saber que lo que tengo no es mío, es del partido, y tengo esa tranquilidad", proclamó el vicealcalde.
Por eso, el vicealcalde estará "absolutamente de acuerdo" con la dirección del PP, con Rajoy y con Gallardón, "no con otros", porque son estas instanacias las que "tienen que tomar las decisiones, no ningún otro externo al partido". "Hay mucha costumbre de que muchos parece que piensan que estas decisiones se tienen que tomar fuera, pero no. Yo estoy a disposición de ellos tres", apostilló.
SEGUIR DE PORTAVOZ
O de cuatro, ya que el cargo de portavoz del Grupo lo decide el alcalde y por elección de los concejales compañeros, por lo que Cobo, que cree "en la Democracia", consideraría "muy respetable si en algún momento hubiera una mayoría de concejales del Grupo que prefirieran otro portavoz", decisión que, de tomarse por mayoría, acataría.
"Porque cuando alguien dice que es demócrata y que respeta la Democracia hay que practicarla. (La votación contra mi continuidad como portavoz) ocurrió, y respeto perfectamente la decisión de los trece concejales que prefirieron otro portavoz. Pero la mayoría prefirió que yo siguiera. Así que si (mis compañeros, Gallardón, Rajoy o el partido) tienen que decirme cualquier cosa, yo lo aceptare y acataré, pero no por esta entrevista, sino siempre. Y me gustaría que todos los cargos pensaran así", zanjó.
Además, el concejal aseguró que se siente "igual de portavoz que hace dos meses" e incluso "tan portavoz como (José Luis Rodríguez) Zapatero se siente presidente del Gobierno con un porcentaje menor" al que consiguió él entre sus compañeros de filas (19 votaron por su continuidad frente a trece que pidieron que fuera cesado como portavoz), e insistió en que los compañeros que propusieron la votación sobre su cargo tenían "todo el derecho a preferir a uno u otro, comprobar si había mayoría y presentarse para ser portavoz de Grupo". Sin embargo, "una vez que todo eso ha pasado uno se tiene que sentir perfectamente en su cargo de secretario general, portavoz o lo que sea cuando lo quiere la mayoría".
"Defenderé siempre el derecho a que cualquier persona, en una institución o en un órgano al que pertenece, pueda presentarse como alternativa a cualquier cargo. Entiendo muy bien que un militante de mi partido en Madrid pueda pretender ser presidente del partido, tiene todo el derecho y lo voy a apoyar siempre. No todo el mundo lo entiende así, me parece que es algo grave", añadió.
LA ENTREVISTA
Con respecto a la entrevista, que el vicealcalde publicó en 'El País' "porque ningún otro medio lo pidió", Cobo aseguró que "no tenía un objetivo concreto", sino que él sólo intentó "decir lo que pensaba y decir la verdad o, mejor, intentar no mentir en nada". "Con las opiniones se puede estar de acuerdo o no, pero los hechos son los hechos y yo contesté a una situación que no me gustaba", afirmó.
Además, aseguró que le gustaría "no tener queja de nada en la vida, que no hubiera nada criticable" y "no tener que hablar más de la entrevista", pero indicó que en estas últimas semanas ha estado "muy a gusto" consigo mismo. "Y sé que hay gente que le ha gustado lo que digo y gente que no, pero es una situación personal que cuando la tenga otra persona me gustaría que vieran el mismo respeto por mi parte que el que pido para mí", continuó.
A partir de ahí, las consecuencias jurídicas que pueda tomar el partido serán "aceptadas, acatadas y asumidas" por Cobo porque "son ellos llos que tienen que decidir la sanción sobre una conducta como ésta". "Lo que está, está", zanjó.
Finalmente, reiteró su opinión de que los espionajes a los que, presuntamente, se vio sometido tanto en su trabajo como en su casa son "muy graves en un Estado de Derecho" pese a que "a algunas personas les pueda parecer poco importante, sobre todo si no encuentran nada", e insistió en que el asunto "está en el juzgado con cuatro imputados" porque "hay algo".
"Otra cosa es que la gente no se acuerde, pero (este tema) está en el juzgado, hay un procedimiento penal abierto con cuatro imputados a los que, como a todos, hay que respetar la presunción de inocencia, pero sobre quienes la jueza ha visto indicios de delito", concluyó, sin pronunciarse sobre si cree que la comisión de investigación en la Asamblea de Madrid debería reabrirse.