La Comunidad destina 46 millones de euros a obras de conservación en 2.700 kilómetros de carreteras

Actualizado: viernes, 5 diciembre 2014 21:49

MADRID, 20 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Comunidad de Madrid ha adjudicado hoy por 46 millones de euros los trabajos de reparación y vialidad invernal de la red de carreteras regional, dividida en siete zonas, para los próximos tres años (hasta 2017), ha informado el consejero de Presidencia y Justicia, Salvador Victoria, en rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno.

Estos trabajos, que suponen un presupuesto anual de más de 15 millones, son una parte importante dentro de la partida que se destina a la conservación y mantenimiento de las carreteras y a los que cada año se añaden además las obras de asfaltado y los acondicionamientos de travesías.

Victoria ha destacado la importancia que tienen los trabajos de conservación de carreteras para garantizar la seguridad vial, por lo que desde el Gobierno regional se les concede una importancia especial dentro de las inversiones en materia de carreteras.

Estas siete zonas cubren una malla de aproximadamente 2.700 kilómetros de vías, incluyendo, además de las carreteras convencionales, de servicio, duplicaciones y travesías. Desglosado por zonas, la que contará con una partida presupuestaria mayor será la Zona Noroeste, concretamente 8,8 millones de euros, casi 3 millones de euros al año.

Esta zona comprende una red de 302 kilómetros de carreteras y atiende a 23 municipios, incluyendo también los Puertos de Navacerrada y Cotos.

Respecto a la zona Norte, el presupuesto ascenderá a 4,9 millones para conservar 203 km de vías. Esta zona incluye 27 municipios. Dentro de ella se enmarcan los puertos de Canencia, Morcuera y Navafría.

A la zona Noreste, por su parte, se ha destinado un presupuesto de seis millones de euros. Su red cuenta con 362 kilómetros, distribuidos en 21 municipios. Respecto a la zona Este, tendrá un presupuesto de 6,6 millones de euros. Su red abarca 402 kilómetros en 25 municipios.

La zona Sureste tendrá un presupuesto de 5,8 millones de euros para mantener una red de 457 kilómetros en 16 municipios, mientras que la zona Sur contará con 6,2 millones de euros, para 237 kilómetros en 17 municipios.

Por último, la zona Oeste tiene un presupuesto de casi 7,6 millones de euros y engloba una red de 635 kilómetros en 21 municipios. Estos contratos incluyen la maquinaria necesaria para realizar los trabajos con la máxima calidad. Para las tareas de vialidad invernal, incluyen la dotación de 56 máquinas quitanieves.

El dispositivo cuenta también con 16 retroexcavadoras o palas, más de 5.000 toneladas de sal, 29 silos y 13 naves para el acopio de sal y 8 plantas de salmuera. Para llevar a cabo los trabajos se dispone de un equipo de 260 profesionales.

TRES GRUPOS DE TRABAJOS

Los trabajos de conservación de carreteras se dividen en tres grupos. El primero de ellos incluye las operaciones de conservación, vigilancia y vialidad invernal, destinadas a mantener las carreteras en un nivel óptimo de servicio y no suponen empleo de materiales nuevos.

Entre ellas se enmarcan la limpieza periódica de calzadas y sus márgenes, la retirada de desprendimientos, de vertidos accidentales, de animales y otros objetos, la conservación del drenaje, de taludes y terraplenes, la limpieza y recolocación de señalización vertical, del balizamiento y de las barreras de seguridad, así como la vigilancia de las zonas de dominio público y protección.

Respecto al segundo grupo de tareas, engloba las operaciones de reparación, reconstrucción y mejora de todos los elementos de la carretera, como firmes, drenajes, taludes, desmontes, terraplenes, señalización vertical, repintado de marcas viales, barreras de seguridad, muros de mediana, vallas de cerramiento y obras de fábrica, entre otras.

Por último, el tercer grupo incluye las operaciones a ejecutar en circunstancias especiales, como puede ser la atención a accidentes y las actuaciones nocturnas o de extremada urgencia que no pueden ser previstas con anterioridad.

La realización de estos trabajos resulta imprescindible para garantizar la seguridad vial de las carreteras madrileñas, puesto que permiten mantener las vías en correcto estado a pesar del desgaste que inevitablemente provoca su uso y los imprevistos que puedan surgir como consecuencia, por ejemplo, de las inclemencias meteorológicas, de la aparición de obstáculos en la vía o de accidentes y otras situaciones excepcionales.