La Comunidad premia a los mayores madrileños por sus ideas sobre hábitos de consumo y nuevas tecnologías

MADRID 2 Jun. (EUROPA PRESS) -

La Comunidad de Madrid entregó hoy los premios del Concurso de Personas Mayores 'Protegiendo nuestro mundo', que este año ha girado en torno a los hábitos de consumo de las personas de la tercera edad en la sociedad de las nuevas tecnologías y ha triplicado el número de participantes respecto a años anteriores.

Según informó hoy el Gobierno regional, este certamen organizado por la Dirección General de Consumo ha premiado a dos mujeres, Carmen López y María Isabel Reyes, por su trabajo 'Tercera Edad y nuevas tecnologías' donde, de una forma personal y elaborada, las autoras reflexionan sobre "la paradoja de nuestro pequeño gran mundo", planeta que en su juventud parecía más pequeño pero más entrañable.

Desde este supuesto se mantiene la idea de que los cambios tecnológicos del siglo XXI propician una mayor desigualdad social, económica y cultural que, sin embargo, tiene por contrapartida unos grandes beneficios para la humanidad. Partiendo de esta base, las autoras estimulan la incorporación de los mayores a las nuevas tecnologías, denunciando el relativo olvido en el que muchas empresas dejan a este sector de la población.

En el trabajo se aportan ideas para corregir esta situación y se anima a los mayores a no dejar de participar en la nueva realidad. Las ganadoras han recibido un diploma acreditativo y un cheque por valor de 3.000 euros de manos de la directora general de Consumo, Carmen Martínez de Sola, quien destacó "la valiosa participación de los mayores a la hora de aportar ideas y sugerencias para que las nuevas tecnologías se adapten a sus necesidades reales cotidianas".

El segundo premio, dotado con 1.000 euros y diploma acreditativo, recayó en Urbano Antonio Pérez por su trabajo, 'Diario de un jubinauta', donde un hombre narra en primera persona una jornada cotidiana en la que se enfrenta a varios momentos de olvido y decisiones de compra de productos que solventa gracias a Internet, pero sin perder de vista el correcto trato humano.

En ambos casos el jurado ha valorado la claridad del proyecto presentado, las ideas propuestas sobre la utilización de las nuevas tecnologías en la mejora de la calidad de vida de los mayores, así como la originalidad de los planteamientos y la presentación y estética.