Consejo de las Mujeres acepta la castración química "si va acompañada de educación y no se usa para reducir las penas"

Actualizado: jueves, 4 octubre 2007 20:40

MADRID, 4 Oct. (EUROPA PRESS) -

El Consejo de las Mujeres de Madrid, explicó hoy que acepta la idea de la castración química como una medida más en la lucha contra la violencia sexual contra mujeres siempre y cuando vaya "acompañada de medidas de reeducación y no se use para conseguir reducciones en las penas".

La presidenta del Consejo, Lourdes Hernández, explicó a Europa Press que el organismo que dirige, órgano de participación de las asociaciones de mujeres de ámbito local en el Ayuntamiento de Madrid y organismo de representación de estas asociaciones en el Consistorio, "está de acuerdo con cualquier medida que se pueda poner en marcha para mejorar la situación", aunque recordó que "antes de llevar nada a cabo habría que estudiar los resultados que esta medida tiene en otros países donde ya se está aplicando".

"Habría que saber como funciona esta medida en otros países, como Alemania o Suecia, donde se aplica desde hace años, porque no podemos decidir si estamos a favor o en contra de una medida sin saber cómo funciona realmente", explicó Hernández.

En cualquier caso, y tras recordar que "la castración química no es realmente una castración, sino sólo la inhibición del deseo sexual y de la erección mediante productos químicos", la presidenta del Consejo opinó que, "si el Gobierno decidiera adoptar esta medida, tendría que ir acompañada de políticas de reeducación".

"Si no se hiciera así no se trataría de una solución al problema sobre todo porque la violencia sexual contra las mujeres no es tanto un conflicto sexual como de poder, de dominio sobre ellas", puntualizó Hernández.

Según la presidenta del Consejo, la castración sin educación podría funcionar con los pederastas y pedófilos, "porque sus ataques no suelen ser violentos y, quizá si se les quita la erección, se podría atenuar algo el problema". Sin embargo, el caso de los violadores de mujeres adultas es diferente.

"Además, la castración química debe ser voluntaria, lo cual no impide al violador tomar la medicación y, de un día para otro, tomar testosterona y estar igual que antes", arguyó Hernández, justificando así su petición de medidas de reeducación.

CUMPLIMIENTO ÍNTEGRO DE LAS PENAS

Asimismo, desde el Consejo de la Mujer de Madrid se recuerda a las víctimas, y se pide que, en cualquier caso, no se use la aceptación de someterse a la castración química para reducir las penas.

"La solución no sólo pasa por la reeducación, sino también por el cumplimiento íntegro de las penas", explicó Hernández, quien también mencionó a Europa Press que, "por otra parte, existe el peligro de que la castración química sí reduzca los ataques sexuales pero no los ataques en general".

En definitiva, "este problema tan complejo necesitaría medidas químicas, psicológicas, educativas y de muchos otros tipos, pero no ha sido sino hasta ahora que se ha empezado un debate real", concluyó Hernández, añadiendo que "asignaturas como Educación para la Ciudadanía podrán poner su granito de arena en la solución de éste y otros muchos temas, porque hasta que no nos empecemos a tratar de igual a igual no se avanzará nada".