Dancausa y Ongil celebran junto a Lina Morgan y un centenar de mayores madrileños el 'Día de los abuelos'

Actualizado: jueves, 26 julio 2007 17:41

MADRID, 26 Jul. (EUROPA PRESS) -

La consejera de Familia y Asuntos Sociales, Gador Ongil, y la delegada de Familia y Servicios Sociales del Ayuntamiento, Concepción Dancausa, acompañaron hoy a la actriz Lina Morgan en el homenaje que le rindieron los mayores de la residencia Montserrat Caballé, de la asociación Mensajeros de la Paz, coincidiendo con el 'Día de los abuelos', festividad de san Joaquín y santa Ana.

Así, tanto consejera como delegada dedicaron unas palabras al centenar de mayores asistentes al acto, acompañadas, a su vez, por el Padre Ángel García, presidente y fundador de Mensajeros de la Paz.

"Esta es la mejor ocasión para demostraron a todos el cariño, la admiración y la devoción que sentimos todos por la figura de los abuelos", afirmó Ongil. "Puedo aseguraros que nuestro objetivo es seguir poniendo en marcha los proyectos y actividades que incrementan vuestra autonomía y os permiten disfrutar de la vida después de tantos años de trabajo", añadió.

Por su parte, Dancausa "como abuela y delegada del Ayuntamiento", según afirmó, quiso manifestar en este encuentro, que uno de los objetivos de esta legislatura es "apoyar a la familias". "Queremos que los mayores se sientan activos y ayudar a que quienes continúan en su casa, lo hagan en las mejores condiciones; y ayudarles a que se incorporen a los nuevas tecnologías para que no se queden atrás", concluyó.

NIÑOS ENFERMOS EXTRANJEROS.

En el mismo acto, presidido por Ongil y Dancausa, se hizo entrega de varios juguetes a dos niños procedentes del Líbano, que el padre Ángel García trajo desde allí, gracias a la campaña 'Un juguete, una ilusión', para ser tratados en el hospital madrileño Niño Jesús.

Según explicó a Europa Press, la responsable de comunicación de Mensajeros de la Paz, Ana de la Calle, desde el año 2003 la asociación trae niños enfermos procedentes de países que han sufrido catástrofes naturales o guerras. "Hemos traído en estos tres años a unos 200 niños iraquíes que afortunadamente han encontrado la salud".

Así, Alí, un niño de cinco años sin piernas y con un sólo brazo, vino a España la semana pasada junto con su madre, para encontrar un tratamiento que mejore su calidad de vida, gracias a unas prótesis. Por su parte, Amina, una niña de cinco años, que según de la Calle, presenta una enfermedad "bastante rara y grave" en la sangre y necesita ser tratada para que pueda crecer bien.