MADRID 31 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Comunidad de Madrid ha detectado a través de la campaña de inspección de productos eléctricos diversas irregularidades en lámparas de bajo consumo por no alcanzar la potencia anunciada, entre otras cuestiones, lo que supone una vulneración de los derechos de los consumidores.
Así lo anunció hoy la directora general de Consumo, Carmen Martínez de Sola, en su visita a las instalaciones del Laboratorio Central Oficial de Electrotecnia, donde se analizan los productos sospechosos que han sido intervenidos a raíz de inspecciones o de denuncias de consumidores.
A lo largo de 2009, este laboratorio sigue analizando diversos parámetros de diferentes lámparas de bajo consumo, como la duración, el flujo luminoso y la potencia eléctrica. Los primeros resultados de la campaña de inspección ponen de manifiesto que las cinco marcas analizadas no llegan a alcanzar ni el 75 por ciento de la potencia marcada, lo que significa que la cantidad de luz emitida es muy inferior a la esperada para las lámparas de este tipo que se pueden encontrar en el mercado.
"El flujo luminoso emitido por cuatro de las cinco marcas analizadas es claramente inferior al declarado, lo que supone un engaño al comprador", expuso Martínez de Sola.
Por otra parte, las equivalencias con las lámparas incandescentes convencionales dadas en la información de las lámparas son muy diferentes y también inferiores a los valores considerados como equivalentes. Además, si se compara el flujo real emitido por cada una de las lámparas con el flujo que emitiría una lámpara incandescente equivalente, según el reglamento de la Comisión Europea, la disminución de la potencia consumida es muy baja en comparación con lo que habitualmente se considera para estas lámparas.
En estos momentos se están realizando ensayos y comprobaciones de la duración y la vida útil de las lámparas, que es otro de los aspectos ventajosos que se supone que deben ofrecer las lámparas de bajo consumo.
Entre los años 2006 y 2008 se han detectado un total de trece luminarias y lámparas de bajo consumo con incumplimientos de calidad y de seguridad para el consumidor. Estas investigaciones han derivado en tres procedimientos sancionadores y la inclusión de dos de estos productos en las redes de alerta por riesgo de sobrecalentamiento e incendio.
El procedimiento que sigue la Dirección General de Consumo, una vez se detectan irregularidades en la calidad de los productos, es iniciar el correspondiente expediente sancionador, ya que puede darse un fraude para el consumidor. No obstante, si se observa que los incumplimientos pueden ser subsanados, se pone en conocimiento de la empresa, que ha de acreditar a la Administración la corrección de las irregularidades detectadas.
En el caso de que se comprueben incumplimientos que afecten a la seguridad de los consumidores, se procede a la retirada el producto del mercado y se incluye en la Red de Alerta Nacional de productos inseguros, para conocimiento y posterior actuación por todas las autoridades autonómicas con competencias en materia de consumo.