MADRID 26 Jun. (EUROPA PRESS) -
Agentes de la Policía Nacional detuvieron en Torrejón de Ardoz a un hombre acusado de un delito de hurto que fue sorprendido cuando trataba de hurtar varias prendas, que pretendía esconder en una caja metálica que portaba en su silla de ruedas.
Ése era su modus operandi: en este compartimento, debajo del asiento, ocultaba los efectos sustraídos en comercios, un artilugio con el que además lograba inhibir los sistemas de alarma.
La pasada semana los policías arrestaban a un hombre que requería un silla de ruedas cuando intentaba abandonar una tienda con prendas valoradas en 585 euros. El sospechoso únicamente debía abrir levemente la tapadera de la caja metálica e introducir subrepticiamente las prendas sustraídas para hacerse con el botín.
Los investigadores creen que este individuo cometía los hurtos por encargo ya que, presumiblemente, terceras personas le solicitaban los efectos que les interesaban y por una cantidad pactada, se encargaba de sustraerlos.