Los dueños de los sexshops del Centro consideran su cierre injusto e ineficaz en la lucha contra la prostitución

Actualizado: jueves, 5 julio 2007 22:23

MADRID, 5 Jul. (EUROPA PRESS) -

Los dueños de los sexshop del distrito Centro de Madrid consideran injusto el cierre de sus negocios e ineficaz en la lucha contra la prostitución, razón que el alcalde Alberto Ruiz-Gallardón ha utilizado para justificar la medida.

Así, el dueño de Sex Tienda, de la calle Montera, criticó en declaraciones a Europa Press la medida, ya que no le quedaba claro si "va contra las prostitutas o contra los sexshop". "No veo la relación entre las dos cosas, porque de hecho, nosotros somos competencia", explicó y añadió que "a veces, las chicas incluso insultan a los clientes de los sexshop".

Así, para él el cierre de este tipo de negocios no hará más que "empeorar la situación de la prostitución" porque todos los clientes de los locales "ya no tendrán elección y acudirán a las prostitutas".

Además, consideró que "la medida es sólo un intento más de solucionar este problema pero sin atacarlo de raíz, así que fracasará como todas las otras medidas que ha tomado el Ayuntamiento" y explicó que "en realidad, más que una medida contra la prostitución parece que van contra la existencia de los sexshop".

Por su parte, uno de los empleados de Molvidan también juzgó la medida como "mala, porque los sexshop no tienen nada que ver con la prostitución" y añadió que "la prostitución existía en la calle Montera antes que los sexshop" por lo que no considera que su establecimiento y los otros del mismo tipo tengan la culpa.

La dueña de una casa de señoritas situada en la misma vía también se mostró escéptica en declaraciones a Europa Press de que la medida tenga ningún efecto. "Entiendo que quieran acabar con la prostitución en la vía pública pero no comprendo qué pueden tener en contra de lo que está cubierto y no ofende a nadie", explicó.

Los empresarios del sector aún no saben si tomarán algún tipo de medida o si convocarán movilizaciones para protestar por la medida.