MADRID, 27 Nov. (EUROPA PRESS) -
El expresidente de Aerolíneas Argentinas, Antonio Mata, ha declarado en la Audiencia Nacional que Hacienda "no ha reclamado nunca" a Air Comet por un delito fiscal y que esta compañía no debía tributar al fisco español por la compra de la aerolínea argentina. "Air Comet no recibió ni un peso, ni un euro, ni un dólar, absolutamente nada", ha añadido sobre la compañía de la que era administrador Gerardo Díaz Ferrán.
Mata, que fue presidente de Air Comet hasta que fue cesado en 2006 por "divergencias" con los consejeros, se ha expresado así en el primer juicio que sienta también en el banquillo de los acusados al ex presidente de la CEOE Gerardo Díaz Ferrán. Ambos se enfrentan a dos años y cuatro meses de cárcel por la compra de Aerolíneas y al pago de una indemnización de 99,04 millones de euros por el impago del Impuesto de Sociedades derivado de la operación.
El fiscal Miguel Ángel Carballo considera que Díaz Ferrán, el ex presidente de Aerolíneas Argentinas, Antonio Mata, y su socio, el fallecido Gonzalo Pascual, debían pagar impuestos por los derechos de créditos obtenidos por valor de 272 millones de dólares que la Sociedad Estatal de Participaciones Preferentes (SEPI) otorgó a Interinvest, matriz de Air Comet, para saldar las deudas que acumulaba la firma argentina.
Mata, que presidía entonces Interinvest, ha explicado detalladamente los pormenores de la operación. De esta forma, ha indicado que la SEPI entregó 300 millones de dólares a Interinvest para pagar a los acreedores y que Air Comet solo asumió la titularidad de los créditos para convertirse en el acreedor mayoritario y "salvar el patrimonio en el consejo de acreedores".
"Se necesitaba el voto de Air Comet porque Interinvest no podía votar y para eso SEPI autorizó que Air Comet adquiriera la titularidad de los créditos", ha indicado Mata, para enfatizar que sus sociedades actuaron en todo momento "de la mano" y siguiendo "instrucciones" de la agencia estatal y que, en todo caso, esta debería hacerse cargo de cualquier consecuencia fiscal.
LA OPERACIÓN NO TRIBUTA EN ESPAÑA NI ARGENTINA
"Si hubiéramos cometido alguna irresponsabilidad, SEPI nos hubiera reclamado algún importe y Hacienda no ha reclamado nunca a Air Comet por un delito fiscal", ha indicado el empresario, que ha defendido la legalidad de su proceder y ha puesto de relieve que Hacienda no inspeccionó a sus sociedades y que "la intención del Gobierno español y el argentino era que Aerolíneas Argentinas levantara cabeza".
En todo caso, Mata ha dejado claro que Interinvest no debía pagar impuestos por esta operación de acuerdo al derecho argentino y que "los acreedores recibieron dinero en mano por las deudas de Aerolíneas". "Estaban locos por cobrar", ha remachado.
"Los créditos se pagan al cien por cien. Sufrieron al final una quita del 60 por ciento pero no generó pérdidas para nadie", ha proseguido el acusado, para añadir que el Tribunal de Cuentas atestiguó que Air Comet "era una mandataria".
Respecto a la expropiación de Aerolíneas por parte del Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner en 2008, ha señalado: "Cuando pierdes no te miran y cuando ganas te lo quitan como pasó con Repsol".
DÍAZ FERRÁN NIEGA TAMBIÉN DELITO FISCAL
El ex presidente de Aerolíneas se ha expresado así después de que durante la mañana el otro acusado, el que fuera jefe de la patronal Díaz Ferrán, le responsabilizara de las negociaciones y la gestión de la adquisición y mostrase su convencimiento de no haber cometido "ningún delito fiscal".
"Estábamos seguros de que no teníamos que pagar nada a Hacienda. Sé que no hay ningún delito fiscal ni lo ha habido nunca", ha dicho de forma tajante, sobre el pago de 99,04 millones de euros que según el Ministerio Público deberían haber abonado a las arcas públicas.
El juicio ha finalizado con el traslado esposado de Díaz Ferrán a la cárcel de Soto del Real y se reanudará mañana con la declaración de varios testigos, entre los que se ha pedido a representantes de la SEPI y al auditor Javier Estellés, "perfecto conocedor" de la contabilidad de Air Comet.
Díaz Ferrán está imputado en varias causas abiertas en la Audiencia Nacional. Entre ellas, por apropiarse indebidamente de 4,4 millones de euros en la quiebra del Grupo Marsans y por simular la venta de sus empresas para eludir el pago a sus acreedores, además de por vender preferentes como miembro del Consejo de Administración.
El Juzgado de Instrucción número 36 de Madrid mantiene abierta otra causa en su contra por su participación en la quiebra de Seguros Mercurio, mientras que otro juzgado madrileño le consideró culpable de la bancarrota de Marsans.