MADRID, 4 Dic. (EUROPA PRESS) -
El grupo municipal de Izquierda Unida (IU) ha denunciado este miércoles que una empresa de catering opera sin licencia en la sede de la Fundación San José, de carácter religioso, pese a que se decretó el cese y clausura de actividad.
En un comunicado, el edil de la formación Ángel Lara ha indicado que realizará una pregunta en la próxima comisión municipal de Seguridad sobre las razones para que esta empresa continúe con su producción en la Fundación y lamenta que siga en funcionamiento pues, "milagrosamente", se ha pospuesto la clausura a enero.
El concejal aporta la documentación del expediente el departamento de inspección de la Agencia de Gestión de Licencias de Actividades (AGLA) por carecer de licencia de funcionamiento elaborado en mayo.
Aparte, ha detallado que un mes antes una nota interna de la Policía municipal se constataba que la actividad de cocina y lavandería en la Fundación Instituto San José y que, en agosto, "se volvió a denunciar por los agentes en este caso por no haber cumplido con la clausura".
"Pese a todo la empresa sigue con su actividad ya que, por el momento, el precinto decretado en mayo se aplaza hasta el 14 de enero", ha apostillado Lara para reclamar las razones que sustenta que se mantenga la actividad pese a la orden de clausura del AGLA.
"Nos referimos a las razones terrenales ya que, al tratarse de la sede de una fundación religiosa, igual hay otras de distinta índole que se nos escapan", ha relatado el edil de IU a continuación.
EVOLUCIÓN DEL EXPEDIENTE
Este grupo municipal detalla que la empresa, Eurest Colectividades SL (filial de la multinacional Eurest Compass), firmó en su día un contrato de arrendamiento con la Fundación San José por la que ésta percibe una renta mensual.
En julio de 2008, según IU, la empresa de catering encarga la obra de un edificio situado en la calle Pinar de San José, propiedad de la Fundación y sede de la misma. "Es cuando de manera simultánea se firma el contrato de alquiler de las instalaciones", relata el grupo municipal.
La formación sostiene que en el proyecto técnico de obra se aseguraba que el edificio a reformar "se utilizará para los servicios propios de la organización religiosa" (oficina, servicios generales, lavandería) y que la cocina "sólo dará servicio a las necesidades propias de la actividad hospitalaria" de la Fundación San José.
IU detalla que a partir de ese momento reciben denuncias de particulares de que la empresa inicia su actividad industrial sin haber obtenido el permiso preceptivo para ello. Por ello, se presenta una denuncia por posible falsedad del proyecto para obtener la licencia de obra y se abre expediente de disciplina ante el AGLA.
El 4 de abril de este año los denunciantes aportan pruebas del ejercicio de actividad industrial con material gráfico de las furgonetas de reparto de la comida preparada. Es el 14 de mayo cuando el AGLA ordena la clausura mientras que el 16 agosto la Policía Municipal acude a comprobar si se ha procedido a él y comprueba que no es así aunque elude mencionar a la empresa.
Sin embargo, según expone Lara, el pasado 31 de octubre la AGLA dicta una resolución que fija la fecha del 16 de enero de 2014 como fecha tope para hacer efectivo el precinto.
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